“Sentí que me moría”: testimonios de quienes han caído en la fosa de 30 metros de Balandra

Las aguas cristalinas de Balandra, uno de los destinos turísticos más icónicos de Baja California Sur, esconden más que postales perfectas.

Entre sus tonalidades turquesa y arena blanca, se encuentra una fosa marina de hasta 30 metros de profundidad, ubicada en el corazón del canal que divide la bahía. Un punto que, a simple vista, parece inofensivo, pero ha sido escenario de rescates, sustos y muertes.

La señalización oficial en la zona suele centrarse en el respeto al ecosistema y el cuidado de especies como las mantarrayas, pero la profundidad repentina y las corrientes que se forman en este canal han tomado por sorpresa a visitantes desprevenidos, como Daniel, quien en 2022 vivió un episodio que lo dejó marcado.

¿Qué tan peligrosa es la fosa de Balandra?

Este artículo incluye testimonios reales de personas que han cruzado por esta zona profunda, recopilados de redes sociales y foros públicos.

Daniel cuenta que, confiado por su condición física, decidió cruzar el canal nadando. "Me aventuré sin saber. Poco a poco, mientras avanzábamos, el agua empezó a cubrirnos el cuerpo: rodillas, muslos, cadera; en este punto mi amigo decidió recular y buscar el camino bajito en dirección a la playa. De repente, ya no toqué piso y empecé a flotar."

Siento que no avanzo, veo el tono oscuro de la fosa por todos lados. Me tranquilizo y floto de muertito. Agarro fuerza y valor y le doy sumergido. Siento que no avanzo. Me digo: Y si me canso. Y si me da un calambre. Comencé a desesperarme. Daniel. Tranquilo. De muertito. Respira. Flota. Y que me acuerdo que tenemos que salir de la playa. Me entra la desesperación. Comienzo a nadar, nomás no avanzo. Voy hacia la orilla. No avanzo. Estoy a la mitad de la fosa. Efectivamente, alguien comentó, hay una corriente. Y eso pensé, en la mentada corriente. Me dije: Hasta aquí llegaste Danielito. Recordé lo que me platicó una exnovia: su papá era un excelente nadador y el mar se lo tragó. Pensé me pasará lo mismo. Daniel, tranquilo y piensa rápido. ¡Auxilio! ¡Auxilio! ¡Auxilio!Una joven pareja en su cayac me escuchó y se acercaron. Me preguntaron si estaba bien. Les respondí, estoy cansado. Agárrate del cayac. En un minuto más o menos, no recuerdo, me acercaron a piso firme. Les agradecí infinitamente.

Luis Daniel -

¿Existen corrientes peligrosas en Balandra?

No es un caso aislado. Una mujer relató cómo su esposo e hija rescataron a dos personas que quedaron atrapados en la misma zona profunda “La señora gritaba que no podía avanzar."

"En una de tantas ocasiones que visitamos Balandra con mi hija, mi esposo y ella andaban explorando, se les hizo fácil porque el agua no les llegaba ni arriba de las rodillas pero al llegar a esa zona escucharon los gritos de ayuda de una señora, la vieron a lo lejos y ella les gritó que por la corriente no podían avanzar, la señora estaba con su nieto, mi esposo primero ayudó al niño, le costó mucho y la señora le decía que fueran a buscar ayuda que la dejaran, como que ya estaba cansada y se había resignado a su suerte, mi esposo le dijó a mi hija que fuera a buscar ayuda, encontró a personas en kayak, mientras mi esposo alejó al niño para ponerlo seguro y luego regresó por la señora, le ayudó, comenta que fue muy difícil pero lograron salir de ahí, en esos momentos venían los del kayak, arrastraron, por decirlo así, a la señora hasta llevarla a una orilla segura, donde la esperaba su nieto, la señora en lágrimas le agradeció enormemente a mi esposo e hija, cuando regresaron conmigo, que yo ya estaba mega preocupada porque no los veía y ya se habían tardado, venían super cansados y asustados"

Mayté Howlett -

Otro testimonio describe cómo una pareja, al regresar de las dunas, perdió el fondo bajo sus pies de forma repentina. “No salíamos, pensé que me moría. Le dije a mi hija que se adelantara a pedir ayuda”.

"Nosotros caminamos a las dunas de enfrente, de ida todo bien el agua nunca nos paso del ombligo, pero de regreso íbamos bien y en un punto no pisamos nada. Fue horrible no salíamos, mi esposo y yo no nadamos bien y lo único en que pensé fue en que se salvará mi hija, así que le dije que se adelantara a pedir ayuda. Después de un batallar sentimos como salimos de lo difícil y pisamos nuevamente, yo ya había visto sobre ese lugar mas profundo pero en ese entonces no se, pensé que estaba más a la derecha pues no se veía oscuro.Fue horrible, de verdad pensé que me moría"

Tania Giselle -

Estos relatos coinciden en lo mismo: el peligro no se ve a simple vista. Muchos creen que todo Balandra es bajito y tranquilo, pero la realidad cambia al llegar al canal.

¿Dónde está la fosa?

Una imagen satelital con anotaciones circula desde hace tiempo en redes. Muestra el Canal de Balandra marcado en rojo, delimitando la zona de 30 metros de profundidad al centro, en contraste con los sectores más claros y seguros, indicados en verde.

A pesar de que no hay señalización física en el lugar, este tipo de mapas se han vuelto vitales para advertir a los turistas.

La zona profunda está justo entre la playa principal y las formaciones rocosas del lado oeste, donde muchos visitantes cruzan a pie o nadando hacia las dunas o el "Hongo de Balandra". El problema: el fondo cambia de manera abrupta y, dependiendo de la marea, la corriente puede arrastrar sin previo aviso.