3 años de la tragedia en la mina El Pinabete, así ocurrió el colapso que marcó a Coahuila
Este 3 de agosto se conmemora el tercer aniversario de uno de los episodios más dolorosos en la historia reciente de Coahuila: el colapso de la mina El Pinabete, ubicada en Sabinas, donde 10 mineros quedaron atrapados tras una súbita inundación.
Aunque el último cuerpo fue recuperado en febrero de 2025, la tragedia sigue resonando entre familiares, comunidades y autoridades, quienes se reunieron este fin de semana para rendir homenaje a las víctimas con una misa y actos conmemorativos.
¿Qué ocurrió el 3 de agosto de 2022 en El Pinabete?
Aquel miércoles de verano, alrededor de la 1:35 de la tarde, una antigua mina abandonada Conchas Norte liberó miles de metros cúbicos de agua que se filtraron de forma repentina a la galería activa de El Pinabete.
En ese momento trabajaban 15 personas; cinco lograron salir con vida, mientras que diez quedaron atrapadas bajo más de 60 metros de tierra y agua.
La tragedia puso en evidencia un cúmulo de omisiones: la mina operaba sin permisos completos, en una zona habitacional y con una vecina histórica de riesgo hidráulico. A pesar de esto, se mantenía en actividad bajo contrato con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), lo que generó aún más controversia.
¿Cómo fue el rescate y qué avances hubo tras el colapso?
Durante más de dos años y medio, cientos de trabajadores de la Comisión Nacional de Protección Civil, Sedena, CFE y expertos técnicos trabajaron en un operativo sin precedentes. Se realizaron más de 1,100 perforaciones, 128 voladuras controladas y se removieron 2.3 millones de metros cúbicos de material para acceder a las galerías colapsadas.
Los primeros restos fueron localizados en diciembre de 2023. El quinto cuerpo apareció en agosto de 2024, y no fue sino hasta el 6 de febrero de 2025 que se localizó el último cuerpo en la galería GSN6 Norte, marcando oficialmente el cierre del rescate tras 918 días de labores ininterrumpidas.
¿Cuál es el impacto de El Pinabete y qué reclaman las familias?
Además del dolor irreparable, la tragedia visibilizó una larga historia de precariedad laboral en la región carbonífera de Coahuila, donde se estima que han muerto más de 3,100 mineros desde el siglo XIX.
La tragedia de El Pinabete renovó el clamor por condiciones seguras en la minería, justicia efectiva y una fiscalización más rigurosa de las concesiones.
Aunque las familias recibieron indemnizaciones iniciales por 4.7 millones de pesos, muchas denuncian que el apoyo económico fue suspendido meses después, cuando la empresa alegó bancarrota. Actualmente, solo dos personas están detenidas por su presunta responsabilidad, y un tercer implicado permanece prófugo con orden de captura internacional.
De esta manera, en 2025, a tres años del desastre, las familias de los mineros no solo lloran a sus seres queridos, sino que siguen exigiendo justicia y un verdadero compromiso institucional para que nunca más se repita una historia como esta.