Denuncian a madre de familia por agresiones en colegio María Álvarez de Saltillo
Un conflicto escolar derivó en denuncias formales luego de que docentes del Colegio María Álvarez de Rodríguez acusaran a Dariela Camarillo de la Cruz, madre de la alumna Melany N., de haberlos agredido física y verbalmente dentro de la institución.
El hecho ocurrió el pasado 24 de septiembre y motivó la activación de protocolos de búsqueda, así como la intervención de autoridades educativas y judiciales.
¿Cómo se originó el conflicto?
De acuerdo con la información oficial, la menor salió de manera intempestiva del plantel al percatarse de la llegada de su madre, situación que quedó registrada en cámaras de seguridad. El hallazgo de una carta en la mochila de la estudiante confirmó que la salida había sido voluntaria.
Ante la ausencia de la alumna, el colegio notificó al 911 y activó el protocolo que marca la Secretaría de Educación Pública. La Fiscalía de Personas Desaparecidas acudió al lugar y coordinó las acciones de búsqueda. Horas más tarde, la menor fue localizada sana y salva en la Alameda Zaragoza, en compañía de algunos familiares.
¿Qué ocurrió dentro del plantel?
Mientras se implementaban las medidas de búsqueda, la madre de la menor ingresó al colegio y, según el comunicado de la institución, adoptó una actitud violenta contra docentes y personal administrativo.
Testimonios refieren que, con apoyo de personas ajenas a la comunidad educativa, retuvo a los maestros contra su voluntad hasta después de las cinco de la tarde, además de proferir insultos y amenazas.
Los trabajadores afectados presentaron denuncias ante las autoridades correspondientes, señalando que se trató de agresiones físicas y verbales.
¿La alumna fue expulsada?
El colegio rechazó categóricamente la versión difundida por la madre en algunos medios de comunicación, donde aseguró que su hija había sido expulsada.
La institución aclaró que no tomó ninguna medida de expulsión, sino que fue el padre de la menor quien, el 1 de octubre, se presentó en las instalaciones para informar que ahora cuenta con la custodia legal de la estudiante.
Ese mismo día, ofreció disculpas al personal y solicitó de manera formal la baja de su hija, decisión que fue aceptada por la institución.
¿Qué postura asumió el colegio?
El Colegio María Álvarez de Rodríguez recordó que su reglamento establece la rescisión de contrato como consecuencia de agresiones al personal docente, administrativo o directivo. Asimismo, agradeció el apoyo de padres de familia y la intervención de las autoridades, reiterando su postura de rechazo a cualquier tipo de violencia en la comunidad educativa.
