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La escalofriante leyenda del diablo que cuida su tesoro maldito en Parras y nadie se atreve a buscar
En el corazón de Parras de la Fuente, las leyendas no son solo cuentos de antaño: son advertencias que sobreviven al paso del tiempo.
Una de las más conocidas es la del diablo que protege un tesoro maldito, escondido en los caminos que conducen a Mesteño, donde cada noche, el silencio del desierto se rompe con el sonido de cadenas y una carreta fantasma que anuncia su llegada.
¿Qué dice la leyenda del diablo de Parras y su tesoro maldito?
Según los relatos locales, al caer la noche puede verse un hombre vestido de negro, con un sombrero ancho y ojos encendidos como el fuego, que recorre los caminos solitarios de Parras.
Los pobladores creen que es el mismo diablo, condenado a custodiar las riquezas que fueron ocultadas durante los tiempos de la Revolución Mexicana.
En aquellos años, los revolucionarios transportaban oro y plata robados de las haciendas y, para evitar ser capturados, enterraban los botines en las brechas y cerros de la región.
Con el tiempo, el diablo se convirtió en el guardián eterno de esos tesoros, y quienes se atrevieron a desenterrarlos jamás regresaron.
¿Quién fue el campesino que enfrentó al diablo?
La historia más conocida habla de un campesino ambicioso, que cansado de la pobreza decidió seguir la carreta para descubrir el origen del ruido nocturno.
Se dice que, cegado por su deseo de riqueza, ofreció su alma a cambio del tesoro, pero al amanecer desapareció sin dejar rastro. Su casa, hoy en ruinas, sigue siendo punto de miedo para los habitantes del lugar.
¿Por qué sigue viva esta leyenda en Coahuila?
En Parras, los vecinos aseguran que las cadenas todavía se oyen por las noches, y que la carreta ardiente del diablo recorre los caminos justo antes de llegar al pueblo; nadie ha podido confirmar su origen, pero la advertencia se mantiene: quien busque el oro, encontrará al demonio.
La leyenda del diablo de Parras no solo mantiene vivo el folclore coahuilense, sino también el respeto por lo desconocido, una historia que recuerda que no todo lo que brilla debe ser desenterrado.