Foto: Marco Juárez
Llevan lectura a cárceles y comunidades vulnerables en Coahuila
La lectura se ha convertido en una llave que abre puertas incluso detrás de los muros. En Coahuila, la Coordinación General de Bibliotecas, Publicaciones y Librerías impulsa espacios lectores en centros penitenciarios, asilos, casas de migrantes y programas de inclusión, fortaleciendo la reinserción social y el acceso a la cultura.
Martha Loera Arámbula, titular del área, informó que actualmente operan bibliotecas activas en Mesillas, en un centro de alta seguridad y en la Región Laguna.
Estos espacios funcionan con un sistema de préstamo y registro que permite dar seguimiento al uso de los libros y fomentar el hábito de la lectura entre las personas privadas de la libertad.
¿Cómo se trabaja para seguir llevando libros a las cárceles?
“Cada vez que llevamos material nuevo, los internos lo reciben con entusiasmo; los libros representan un escape a su realidad y una forma de sublimar la tristeza o encontrar inspiración”, expresó Loera.
El programa también incluye la entrega constante de libros donados para renovar los acervos y mantener el interés de los lectores. Además, la iniciativa se ha extendido a asilos de adultos mayores, la Casa del Migrante, la Casona de los Pequeños y la Aldea Pepita, donde se promueven cuentos y lecturas infantiles.
¿Qué otros sectores son apoyados con programas de lectura?
Como parte del enfoque incluyente, la coordinación impulsa salas Braille y actividades dirigidas a niños y jóvenes con autismo, síndrome de Down y otras condiciones del desarrollo. Recientemente, un grupo de campeones con síndrome de Down que triunfaron en París compartió su experiencia con estudiantes de primaria en Saltillo.
“Estamos convencidos de que la lectura debe ser accesible para todos, sin importar la condición o el contexto. Nuestro reto es seguir llevando libros y actividades culturales a cada rincón donde puedan transformar vidas”, concluyó Loera.
¿Qué programas se están implementado en las Bibliotecas?
Como parte de los esfuerzos para atraer a más público a las bibliotecas, actualmente se está trabajando en que algunos bibliotecarios puedan tomar cursos de Lengua de Señas Mexicana, para poder incluso contar cuentos a grupos con alguna discapacidad auditiva y de esta manera atraer mayormente la atención de niños y jóvenes por la lectura.