En Durango, ser hombre tiene sus desventajas en la impartición de justicia, aseguran expertos en leyes
La impartición de justicia en Durango no es equitativa, especialmente cuando se trata de casos donde los hombres son víctimas, señalaron especialistas en derecho. Según expertos, los procesos legales suelen ser más lentos y complejos cuando un hombre emprende acciones legales relacionadas con la violación a su intimidad o situaciones de violencia doméstica.
El abogado Christian Montenegro, especialista en defensa legal de hombres, explicó que los procesos judiciales para ellos suelen ser más largos y tediosos que los de casos similares en los que las víctimas son mujeres.
Desventajas en los procesos legales
Montenegro detalló que, cuando un hombre denuncia la violación a su intimidad sexual, la integración de una carpeta de investigación puede tardar hasta ocho meses. En contraste, cuando la víctima es una mujer, el proceso puede completarse en aproximadamente 15 días.
Esto no se debe a negligencia del Ministerio Público, aclaró el abogado, sino a la falta de personal especializado. Actualmente, solo existe un Ministerio Público que atiende delitos en contra de los hombres, mientras que las mujeres cuentan con Centros de Justicia para la Mujer, donde trabajan ministerios públicos, psicólogos y trabajadores sociales.
Aumentan las denuncias de hombres víctimas de violencia
El especialista reconoció que cada vez más hombres se atreven a denunciar casos de violencia doméstica, aunque el sistema judicial se ve rebasado por la falta de recursos humanos y de infraestructura para atenderlos adecuadamente.
“Se han presentado casos donde los hombres resultan con lesiones físicas acreditadas, incluso por el uso de armas blancas”, señaló Montenegro.
Falta de reconocimiento institucional
El abogado también criticó la falta de visibilidad de la violencia contra los hombres en los estudios oficiales. Afirmó que, en las encuestas del INEGI sobre violencia, únicamente se pregunta a las mujeres si han sido víctimas de agresión por parte de su pareja, dejando fuera la perspectiva masculina.
Finalmente, Montenegro recomendó a las víctimas acudir con asesoría legal especializada y evitar mediatizar los casos para no entorpecer los procesos judiciales. “La justicia debe ser igual para todos, sin importar el género”, subrayó.