El “Monstruo de Atizapán”, vuelve al penal de Tenango del Valle luego de estar hospitalizado en Toluca
Durante el mes de agosto de 2025, el "monstruo de Atizapán", Andrés Filomeno "N", fue ingresado de emergencia al Hospital Adolfo López Mateos, en Toluca, debido a serias complicaciones respiratorias.
Tras recibir atención médica por casi dos meses, fue dado de alta y el 1 de octubre retornó al penal de Tenango del Valle, donde cumple diversas condenas. Su salud continúa siendo frágil, motivo por el cual permanece bajo vigilancia especial dentro del centro penitenciario.
¿Cómo fue descubierto el monstruo de Atizapán?
La detención de Andrés Filomeno "N", ocurrió en mayo de 2021 cuando el policía Bruno Ángel Portillo visitó su domicilio en la colonia Lomas de San Miguel, Atizapán de Zaragoza, para buscar a su esposa, Reyna González.
En la vivienda se encontraron evidencias estremecedoras: el cuerpo de Reyna estaba desmembrado. Este hallazgo desencadenó una investigación que reveló una cadena criminal de décadas.
¿Qué evidencia vinculó a Andrés Filomeno "N" con múltiples crímenes?
Durante la inspección del inmueble, se encontraron elementos que permitieron revelar el alcance de sus actos:
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Más de 4,300 restos óseos, que pertenecen a al menos 19 víctimas identificadas.
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Documentos y grabaciones que sugieren decenas de mujeres desaparecidas.
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Herramientas relacionadas con la comisión de los crímenes.
Estos indicios respaldan la acusación de ser uno de los asesinos seriales más notorios del país.
¿Qué sentencias ha recibido el monstruo de Atizapán?
Desde marzo de 2022, Andrés Filomeno "N" ha recibido ocho sentencias por feminicidio y desaparición forzada. Entre ellas destacan:
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Una condena vitalicia.
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Una sentencia de 92 años.
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Seis sentencias adicionales de 55 años cada una.
Estas penas reflejan la gravedad y la extensión de sus delitos.
¿Por qué su vigilancia es considerada especial?
Debido a su perfil criminal y al impacto social del caso, las autoridades penitenciarias mantienen estrictos protocolos de seguridad y monitoreo constante de su estado de salud.
