Foto: X (@FiscaliaPuebla)
Estudiante de la BUAP detenido por amenazas a compañeros y docentes
Brandon “N”, estudiante de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), fue detenido por autoridades estatales tras ser identificado como el presunto responsable de amenazas de muerte dirigidas a miembros de la comunidad universitaria a través de redes sociales.
El arresto se realizó en un operativo en la colonia Jardines de San Manuel, Puebla, donde el joven portaba un instrumento punzocortante.
La Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE) informó que la investigación inició cuando la Policía Cibernética detectó mensajes amenazantes dirigidos a docentes y estudiantes de la BUAP.
Con labores técnicas especializadas, lograron rastrear la ubicación del presunto agresor.
¿Qué encontraron durante la investigación?
Con base en pruebas recabadas, se solicitó y obtuvo una orden de cateo en el domicilio de Brandon “N”.
Durante el operativo, las autoridades aseguraron un arma de fuego y varios dispositivos electrónicos que podrían estar vinculados a la difusión de los mensajes amenazantes.
El hallazgo fue calificado como determinante para evitar un posible ataque dentro de la comunidad universitaria.
En un comunicado, la FGE señaló: “Con su detención y el aseguramiento de evidencia, se corroboró la existencia de una amenaza latente y su posible materialización, logrando evitar afectaciones importantes para las y los universitarios”.
¿Qué relación tiene este caso con otros incidentes recientes en universidades?
El arresto de Brandon ocurre semanas después de un ataque en el Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) Plantel Sur de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), donde un estudiante asesinó a un compañero y lesionó a un trabajador.
El agresor, Lex Ashton, reveló posteriormente en chats de redes sociales que había compartido sus planes en grupos de la comunidad “incel”, espacios donde se difunde odio misógino y se incentivan actos violentos.
¿Qué medidas adoptan las universidades?
En respuesta a ese ataque, la UNAM anunció modificaciones a sus protocolos de seguridad y un reforzamiento en los programas de atención psicológica.
En Puebla, el caso de Brandon “N” refuerza la necesidad de vigilancia en redes sociales y coordinación entre autoridades universitarias y cuerpos de seguridad para prevenir hechos violentos.