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¿Qué es el Plan DN-III-E y cómo funciona tras las lluvias en México?
Las intensas lluvias que azotaron gran parte del país hace cinco días dejaron tras de sí un panorama crítico: inundaciones, deslaves, desbordes de ríos y pérdidas humanas.
Ante la magnitud del desastre, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) mantiene activo el Plan DN-III-E, una estrategia militar de apoyo para auxiliar a la población afectada.
El titular de la dependencia, Ricardo Trevilla Trejo, informó sobre las acciones desplegadas y los avances en las labores de auxilio, principalmente en Veracruz, Puebla, Hidalgo y Querétaro, donde se concentran los mayores daños.
¿En qué consiste el Plan DN-III-E?
El Plan DN-III-E es un operativo de emergencia implementado por la Sedena en coordinación con el Ejército y la Fuerza Aérea Mexicanos.
Su finalidad es proteger a la población civil y apoyar en situaciones de desastre natural o accidentes de gran impacto, garantizando la seguridad, el rescate y la recuperación de las zonas afectadas.
El operativo se divide en tres fases principales: prevención, auxilio y recuperación, en las que participan elementos de las fuerzas armadas y autoridades locales para asegurar una respuesta integral.
¿Qué tareas se realizan en la fase de prevención?
Durante esta etapa se busca anticipar riesgos y minimizar daños, fortaleciendo la capacidad de respuesta ante emergencias.
Entre las acciones destacan:
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Simulacros y ejercicios de gabinete.
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Coordinación con autoridades y organismos civiles.
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Identificación de zonas vulnerables.
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Monitoreo de fenómenos hidrometeorológicos.
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Actualización de atlas de riesgo y directorios de emergencia.
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Conferencias para alertar a la población.
¿Qué acciones se llevan a cabo durante la fase de auxilio?
Una vez que ocurre el desastre, la Sedena activa la segunda fase del plan, enfocada en salvaguardar vidas, bienes y servicios básicos.
Las labores incluyen:
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Alertamiento inmediato y evaluación de daños.
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Búsqueda, rescate y atención médica.
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Seguridad en zonas siniestradas.
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Abastecimiento de agua, alimentos y medicinas.
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Coordinación con autoridades estatales y municipales.
¿Qué implica la fase de recuperación?
La última etapa se centra en reconstruir lo afectado y restablecer la normalidad en las comunidades; entre las acciones se encuentran:
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Retiro de escombros y lodo.
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Rehabilitación de caminos y puentes.
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Distribución de despensas y artículos de primera necesidad.
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Restablecimiento temporal de servicios básicos.
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Garantía de seguridad en zonas vulnerables.
La Sedena ha reforzado su presencia en Veracruz, Puebla, Hidalgo y Querétaro, estados donde las lluvias han provocado los daños más severos.
Las brigadas del Ejército y la Fuerza Aérea continúan desplegadas para rescatar a la población, rehabilitar caminos y distribuir ayuda humanitaria, mientras se evalúan los efectos a largo plazo.
El Plan DN-III-E representa uno de los pilares del compromiso del Ejército Mexicano con la ciudadanía.
Las acciones de prevención, auxilio y recuperación continuarán hasta que las condiciones en las zonas afectadas permitan restablecer la normalidad y garantizar la seguridad de las familias mexicanas.