Airbnb en Nuevo León: pieza clave en el Mundial 2026 de la FIFA
Con el Mundial 2026 en puerta, Monterrey se prepara para recibir a miles de aficionados de todo el mundo. En este contexto, la plataforma Airbnb se perfila como un complemento clave a la oferta hotelera tradicional, al brindar hospedaje flexible y diversificado en distintos puntos de la ciudad.
Su impacto no solo será turístico, también promete beneficios económicos directos para los anfitriones locales.
¿Qué capacidad de hospedaje ofrece Airbnb frente a los hoteles?
De acuerdo con estimaciones del sector turístico, la capacidad hotelera de Monterrey alcanza cerca de 20,000 habitaciones en establecimientos formales. Sin embargo, Airbnb ya cuenta con más de 12,000 espacios activos en el área metropolitana, lo que significa un incremento sustancial en la disponibilidad de hospedaje para la justa deportiva.
- Hoteles: 20,000 habitaciones aproximadamente.
- Airbnb: 12,000 opciones activas en la metrópoli.
Esto implica que Airbnb aportará alrededor del 40% de la oferta total de hospedaje, ayudando a cubrir la alta demanda esperada durante los partidos en el Estadio BBVA.
¿Qué ingresos generarán los anfitriones locales?
La llegada de turistas internacionales representa una derrama económica significativa. De acuerdo con estimaciones basadas en la tarifa promedio de Airbnb en Monterrey (entre 1,500 y 2,000 pesos por noche), los anfitriones podrían percibir ingresos adicionales de entre 400 y 500 millones de pesos durante el torneo, dependiendo del número de noches reservadas.
- Tarifa promedio: 1,500–2,000 pesos por noche.
- Estancia estimada por visitante: 4 a 6 noches.
Este ingreso se suma al gasto turístico en transporte, gastronomía y entretenimiento, generando un círculo virtuoso para la economía local.
¿Cómo transformará Airbnb la experiencia turística en Monterrey?
Más allá de los números, la plataforma ofrece una experiencia distinta al visitante, al permitirle alojarse en barrios tradicionales o zonas emergentes, conviviendo más de cerca con la cultura regiomontana. Además, al descentralizar el hospedaje, distribuye los beneficios económicos en comunidades que antes no participaban del turismo.
Con este panorama, Monterrey no solo verá colmadas sus calles de aficionados, sino también abrirá nuevas oportunidades para que la hospitalidad regiomontana brille en el escaparate mundial.