La preservación del entorno en Nuevo León comienza con la correcta disposición de los árboles naturales de Navidad usados. Foto: Vianney Carrera
¿Cómo desechar correctamente los árboles naturales de Navidad en Nuevo León?
Tras las fiestas decembrinas en Nuevo León, los árboles naturales pueden convertirse en residuos de alto impacto si no se manejan adecuadamente.
Especialistas llaman a evitar el consumo impulsivo y a darles un destino responsable para reducir basura y contaminación.
La temporada navideña deja algo más que celebraciones: también incrementa la cantidad de residuos que se generan en los hogares.
En ese contexto, los árboles naturales de Navidad se convierten en uno de los desechos más visibles al terminar las fiestas.
La integrante del Comité Ecológico Integral, Carla González platicó para POSTA que es clave reflexionar sobre el destino de estos residuos.
Consideró muy importante que en estas fechas se tome en cuenta el volumen excesivo de residuos que se van a generar producto de posadas, regalos y celebraciones, así como el desecho de los pinos tanto naturales como artificiales.
Aquí te damos una radiografía de cómo puedes desecharlos.
¿Por qué los árboles navideños pueden convertirse en un problema ambiental?
Cuando un árbol natural se desecha junto con la basura doméstica, pierde cualquier posibilidad de reaprovechamiento y termina saturando los sistemas de recolección.
González advierte que muchos residuos navideños, incluidos los pinos, se tiran sin planeación, a pesar de que existen alternativas para reducir su impacto.
En este contexto, recordó que consumir no es una necesidad de pasar la Navidad, por lo que el problema comienza desde la compra impulsiva de productos que se usan por poco tiempo y después se convierten en basura.
Un árbol natural mal manejado representa no solo un residuo voluminoso, sino también el desperdicio de un recurso natural que pudo tener un mejor destino.
¿Cuál es la opción más sostenible al elegir un árbol de Navidad?
Desde la perspectiva de la sostenibilidad, la especialista subrayó un principio clave:
“No hay nada más sostenible que lo que ya existe”, explicó.
Esto significa que, si una familia ya cuenta con un árbol artificial, lo más responsable es seguir usándolo año con año.
Sin embargo, cuando se opta por un árbol natural, es importante que provenga de una plantación sostenible o de esquemas de adopción que permitan su reforestación.
Estas decisiones reducen el impacto ambiental y evitan prácticas de consumo que solo incrementan la generación de residuos al final de la temporada.
¿Qué se debe hacer con un árbol natural después de Navidad?
Al concluir las celebraciones, los árboles naturales no deben mezclarse con la basura común.
González enfatiza que ningún material se recicla por sí solo.
“No solamente tiene que ser reciclable por su naturaleza, sino que aparte nosotros tenemos que llevarlo a un centro de acopio para reciclar”.
Esto aplica también a los pinos navideños, que pueden ser triturados para composta o aprovechados como cobertura vegetal, siempre que se lleven a los espacios adecuados.
Dejar el árbol en la calle o tirarlo en el basurero impide cualquier tipo de aprovechamiento.
¿Cómo reducir el impacto ambiental más allá del pino?
La experta recordó que el manejo responsable del árbol debe ir acompañado de un consumo consciente durante toda la temporada.
Decorar con lo que ya se tiene, evitar artículos de mala calidad y reducir el uso de desechables ayuda a disminuir la cantidad de residuos generados.
Finalmente, González llamó a reconectar con el sentido de la Navidad, recordando que no se trata de consumir” sino de convivir.
“Entre menos desperdicio, menos residuos, menos basura”, destacó para así beneficiar tanto al planeta como a la economía familiar.