Persona responsable de la agresión. Foto: Captura de pantalla/Canal 28
VIDEO l Agreden a periodista durante transmisión en vivo en Monterrey
La labor periodística en las calles de Monterrey enfrentó un lamentable episodio de violencia este miércoles.
Brenda González Ramírez, reportera de Canal 28, fue agredida física y verbalmente mientras realizaba un enlace en vivo para el noticiero matutino NOTICIAS 28 AM. El incidente, que ocurrió a plena luz del día, ha generado una condena inmediata por parte de la directiva del canal estatal.
¿Cómo ocurrieron los hechos en la zona de la Alameda?
El ataque se registró la mañana de este 3 de diciembre en el cruce de las calles Pino Suárez y Aramberri, en el Centro de Monterrey. La periodista se encontraba reportando sobre la fluidez vial y las opciones de venta de desayuno disponibles para los transeúntes en la zona.
De manera repentina, una mujer desconocida se acercó a González Ramírez mientras esta se encontraba al aire. La agresora comenzó a referirse a la comunicadora con palabras altisonantes para, posteriormente, propinarle un golpe en el brazo izquierdo frente a la cámara.
¿Cuál fue la postura de Canal 28 ante la agresión?
La seguridad de la zona donde ocurrió el incidente corresponde a la Policía Municipal de Monterrey. Ante esto, Roberta Carrillo Zambrano, directora del Sistema de Radio y Televisión de Nuevo León (Canal 28), reaccionó con firmeza ante la vulneración de la seguridad de su equipo.
- Carrillo Zambrano condenó los hechos y emitió una solicitud directa a las autoridades:
- Exigió al municipio de Monterrey medidas de protección inmediatas.
- Solicitó garantías para que las y los periodistas puedan ejercer su labor informativa sin correr riesgos.
¿Qué sigue para la seguridad de los reporteros?
Este suceso pone de manifiesto la exposición constante que sufren los reporteros de campo. La petición institucional busca no solo salvaguardar la integridad de Brenda González, sino sentar un precedente para evitar que la violencia, tanto verbal como física, se normalice contra los comunicadores que sirven a la ciudadanía neolonesa.
