La CURACIÓN VERDADERA tiene que venir de ADENTRO | Eduardo Osegueda
En una reciente entrevista con Fernanda Familiar para POSTA LÍDERES, Eduardo Osegueda, fundador de Fuerza Integral, compartió el testimonio de su impactante historia de vida: el camino de un diagnóstico terminal a una autocuración radical basada en la conexión mente-cuerpo.
Osegueda, quien superó décadas de padecimientos y tratamientos fallidos, explicó cómo la toma de responsabilidad personal y un cambio de enfoque transformaron su salud, una filosofía que ahora difunde a través de su centro de entrenamiento.
¿Qué lo llevó a abandonar la medicina convencional y buscar la autocuración?
Eduardo Osegueda relató que su vida estuvo marcada por la enfermedad desde los dos años, con un cuadro bacteriano que derivó en dosis altísimas de medicamentos y un consecuente daño hepático a los cinco.
A pesar de años de ayuda médica, su cuadro se complicó cerca de los 20, llevando a temas de negligencia y abuso médico. Tras buscar especialistas en Estados Unidos y Europa, el diagnóstico fue terminal: su hígado estaba destrozado, sus riñones prácticamente no funcionaban y le quedaban “unos cuantos meses” de vida.
Fue entonces cuando, después de darle 20 años a la medicina convencional, decidió asumir la responsabilidad. “Me cayó el 20 de que la curación verdadera tiene que venir de adentro,” afirmó, iniciando una búsqueda personal para cambiar algo internamente.
¿Cómo logró sanarse completamente a pesar de desafiar todas las prohibiciones médicas?
La búsqueda de Osegueda lo llevó a un hospital en China, libre de medicamentos, recomendado por un médico holandés. Durante su estancia, no pudo llevar ningún medicamento, cuidar su dieta ni evitar las condiciones ambientales que sus especialistas habían prohibido.
De hecho, consumía “muchísimo puerco,” grasas saturadas y aceites que estaban estrictamente contraindicados, además de estar en un lugar contaminado y frío.
A pesar de desafiar cada una de las prohibiciones, la clave fue el trabajo de conexión mente-cuerpo que aprendió. En tan solo cinco meses de entrenamiento, logró recuperar completamente su vitalidad y peso, sanando por primera vez en su vida.
“La dieta no me ayudó, pero me curé a pesar de la mala dieta,” concluyó, demostrando el poder de la mente sobre los procesos fisiológicos.
¿Cuál es el secreto de la conexión mente-cuerpo que enseña Fuerza Integral?
El conocimiento que trajo de China es ahora la base de Fuerza Integral, que por 25 años ha difundido el concepto de que la mente puede incrementar la potencia de los procesos de autocuración y regeneración del cuerpo. El principio fundamental es: “Donde pones tu atención, pones tu fuerza”.
Osegueda explica que la vida moderna, llena de estímulos externos, drena constantemente la fuerza vital. El entrenamiento universal que enseña se centra en mantener la atención en el centro del cuerpo (Jara o Dantien), ubicado entre el ombligo y la espalda baja.
Al hacerlo, la fuerza de la persona permanece internamente, reduciendo el estrés y la ansiedad, mejorando el descanso, e incrementando el rendimiento, incluso en atletas, de forma inmediata.
Eduardo Osegueda enfatizó que el ser humano es una unidad integral (cuerpo, mente, emoción y espíritu) que comparte el mismo centro.
Su trabajo ha transformado la vida de decenas de miles de personas, ayudándoles a recuperar la salud física y a manejar el estrés laboral y la ansiedad, sirviendo como un recordatorio del poder que reside al interior de cada persona para transformar su realidad.
