Elimina malas energías y cierra ciclos con este ritual de 6 pasos
Con la llegada del último bimestre del año, muchos comienzan a prepararse física, pero sobre todo mentalmente para cerrar ciclos y comenzar renovados un nuevo año.
De acuerdo con especialistas en bienestar emocional y psicología energética, realizar rituales simbólicos puede ayudar a reducir el estrés, mejorar el enfoque y reforzar la sensación de control sobre lo que está por venir.
Por lo que, de esta forma, con este sencillo ritual podrás limpiar y renovar tu energía y cerrar todos lo pendientes antes del inicio de una nueva etapa.
¿Qué se necesita para realizar este ritual en casa?
Este ritual está diseñado para liberar lo negativo y atraer lo nuevo y es tan sencillo, que solo se requieren tres elementos:
- Sal de mar
- 1 vela blanca
- 1 recipiente resistente al calor
Estos tres elementos son símbolos de purificación y equilibrio, utilizados para representar claridad, paz y nuevos comienzos.
Todos los materiales pueden conseguirse fácilmente en supermercados o tiendas naturistas.
¿Qué pasos seguir para realizar el ritual?
Lo primero que deberás hacer será buscar un lugar que te brinde tranquilidad y que tenga, además, buena ventilación.
Cuando hayas encontrado el lugar ideal estos son los pasos que deberás seguir:
- Coloca la vela blanca frente a ti y enciéndela
- Pon la sal marina en el recipiente
- Observa la llama y visualiza cómo se disuelven tus bloqueos, miedos o preocupaciones
- Sopla suavemente la vela
- Tira la sal por el desagüe
- Agradece la purificación y el espacio que se abre para lo nuevo
Este tipo de ritual es recomendable hacerlo antes de comenzar un nuevo proyecto, o bien, cuando creas necesario renovar tu energía.
¿Por qué hacer un ritual de limpieza energética?
Este tipo de rituales pueden ayudar de forma simbólica a conseguir cerrar ciclos, además de generar calma y claridad mental. Además, muchas personas los usan para aliviar de alguna forma, la ansiedad y el estrés.
Por lo que más allá de lo espiritual, este tipo de rituales funcionan como un acto de autocuidado y enfoque emocional.