Nayarit tiene 3 montañas para escapar del calor en las vacaciones de verano
Nayarit es uno de los destinos que ofrece sitios ideales para huir de las altas temperaturas del verano, con paraísos naturales que lo posicionan como uno de los espacios frescos y culturalmente ricos.
Tiene pueblos mágicos que no solo ofrecen historia, cultura y tradiciones, los visitantes encontrarán experiencias únicas en medio de montañas, volcanes y aguas termales.
El estado de Nayarit es una joya para los amantes de la naturaleza, de la adrenalina y la aventura, pero al mismo tiempo de quienes solo buscan la quietud y la tranquilidad para descansar y alcanzar su bienestar emocional.
1. Jala, sitio perfecto en tradición, maíz gigante y un volcán activo
Jala es el primer pueblo mágico en Nayarit , un símbolo de identidad agrícola y espiritual, ubicado a los pies del volcán El Ceboruco, sitio ideal para una escapada de verano o unas vacaciones en familia.
Con calles empedradas y arquitectura colonial, que es un viaje cultural que recorrerlas en un clima fresco durante el verano es la mejor opción para huir del calor.
En agosto, además de visitar su zona montañosa en El Ceboruco, disfrutar de la Feria del Elote con mazorcas gigantes de hasta 43 cm y degustar sus platillos típicos es un deleite imperdible.
Al visitar Jala no se puede dejar de explorar sus monumentos religiosos, como la Basílica Lateranense y el antiguo convento, donde una virgen mestiza fusiona las raíces indígenas y católicas del pueblo.
Recorrer túneles, criptas y el Museo de Arte Sacro son otras de las actividades que complementan la visita al pueblo mágico de Jala.
2. Amatlán de Cañas, con su oasis de aguas termales
Amatlán de Cañas es un pueblo mágico que se distingue por sus paisajes agrestes, templos antiguos y una rica tradición en la elaboración de chocolate.
Su joya es El Manto, un spa natural rodeado de rocas y cascadas, que lo hacen un destino ideal para quienes buscan relajación y bienestar, pero también para los amantes del turismo de aventura y adrenalina.
Entre aguas termales, rutas de senderismo y pueblos mineros abandonados, los visitantes pueden sumergirse en un ambiente tranquilo, con una gastronomía que reconforta hasta en las noches más frescas, es la mejor forma de enfrentar las altas temperaturas y el calor del verano.
3. Santa María del Oro, una laguna volcánica que reconecta con la naturaleza
Enclavada entre montañas y oculta en el cráter de un volcán extinto, la laguna Samao en Santa María del Oro ofrece uno de los paisajes más serenos del sur de Nayarit, con un espectáculo único: el cambio de color de su agua.
Esta laguna rodeada de cerros, según cuentan los habitantes de esta localidad, se formó por la caída de un meteorito hace miles de años.
Ideal para nadar, acampar o simplemente disfrutar del clima templado, Santa María del Oro es el refugio perfecto lejos del calor y del bullicio playero.
Este cuerpo de agua está rodeado de bosques de encinos, por lo que el senderismo o caminatas entre los árboles es una de las actividades para disfrutar de la naturaleza, además del avistamiento de flora y fauna de la región.
¿Por qué las montañas son un destino ideal para el verano?
La visita a las montañas en Nayarit, no solo brinda la oportunidad de reconectar con la naturaleza, también ofrece la oportunidad de disfrutar de temperaturas más frescas, de alejarse del bullicio de las playas abarrotadas, sino de disfrutar el silencio y la tranquilidad que ofrecen estos parajes.
