Localizan presunto campo de exterminio en Reynosa con restos humanos calcinados
Integrantes del Colectivo Amor por los Desaparecidos en Tamaulipas descubrieron una posible fosa clandestina en la brecha El Berrendo, al poniente de Reynosa. El sitio presenta características similares a un campo de exterminio, con restos óseos humanos calcinados dispersos en un área de 30 metros cuadrados.
¿Qué encontraron los colectivos de búsqueda en Reynosa?
El pasado domingo 4 de mayo, el colectivo Amor por los Desaparecidos en Tamaulipas localizó lo que podría ser un nuevo sitio de exterminio o cocina clandestina, en una zona de maleza cercana al canal Rodhe, al poniente de Reynosa.
Durante la jornada de búsqueda, se hallaron fragmentos óseos humanos con evidencia de exposición térmica, es decir, restos calcinados, dispersos en una fosa de aproximadamente 30 metros cuadrados.
Además de los restos humanos, los buscadores encontraron objetos personales como tenis, hebillas de cinturón, botones, encendedores y una chaira, además de artefactos balísticos. El sitio fue acordonado por elementos de la Guardia Estatal mientras se notificó a las autoridades competentes.
¿Qué acciones tomaron las autoridades tras el hallazgo?
Una vez confirmado el hallazgo, elementos de la Policía Investigadora y de Servicios Periciales se trasladaron al lugar para realizar diligencias forenses, recolección de indicios y asegurar la zona. Se espera que los restos localizados sean sometidos a análisis genéticos que permitan su identificación y vinculación con casos de personas desaparecidas en la región.
La Secretaría de Seguridad Pública del Estado colaboró con el resguardo del área y ha mantenido comunicación con el colectivo, que solicitó a familiares de desaparecidos acudir al Ministerio Público para solicitar informes sobre los restos hallados.
¿Por qué se considera un posible campo de exterminio?
El colectivo calificó el sitio como un presunto campo de exterminio, por las condiciones en las que fueron encontrados los restos: calcinados, fragmentados y dispersos, patrón similar al observado en lugares como el Rancho Izaguirre, en Teuchitlán, Jalisco. Estas áreas, conocidas como "cocinas", son utilizadas por grupos criminales para desaparecer cuerpos mediante fuego y otras técnicas.
Este hallazgo se suma a otros puntos documentados en Tamaulipas donde se presume la existencia de prácticas sistemáticas de desaparición y destrucción de cuerpos. Los colectivos piden a las autoridades dar prioridad a las investigaciones y reforzar los mecanismos de búsqueda y justicia.