Rastro de la UAT amplía su Certificación Tipo Inspección Fiscal
Fue el gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal Anaya, quien recibió la ampliación de la certificación Tipo Inspección Federal (TIF) para la operación del rastro de la Universidad Autónoma de Tamaulipas.
Lo anterior convierte a la UAT en el único centro universitario de todo el país en contar con este documento que expide el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica).
¿Cuál es la importancia de la Certificación TIF?
La Certificación Tipo Inspección Fiscal permite la actividad diaria de la sala de corte y deshuese para la especie bovina, cámara de producto terminado, almacén, empaque y andenes de carga y descarga en el rastro ubicado en la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la UAT, campus Ciudad Victoria.
Y lo relevante de este acontecimiento radica, también, en que la Universidad Autónoma de Tamaulipas se convierte en la primera universidad del país en obtener un certificado de esta naturaleza.
Leandro David Soriano García, director general de SENASICA, señaló que con esta certificación, el rastro de la UAT garantiza el cumplimiento de la normativa aplicable relacionada con el bienestar animal.
Además, adopta protocolos que aseguran un trato digno a los animales durante su sacrificio, así como las buenas prácticas de manufactura implementadas durante la transformación de los bienes de origen animal destinados al consumo humano, garantizando que la carne que llega a las mesas de la población, a las carnicerías y a los mercados cumple con los más altos estándares de higiene y sanidad.
¿Cómo beneficia esta certificación a los tamaulipecos?
Con este paso de certificación se favorece el desarrollo del estado, mejora la economía en la región y fortalece la cadena productiva, además de abrir las puertas para que la carne producida en la Universidad Autónoma de Tamaulipas compita no solo a nivel nacional, sino también a nivel internacional, cumpliendo con estándares aún más exigentes.
El próximo paso es contar con un rastro de pequeñas especies, para que los productores de cabritos y de bovinos de Tamaulipas puedan tener la oportunidad de incorporarse a este modelo y darle valor agregado a su producción.
Esto significa que productores de localidades y zonas rurales alejadas, por el ejemplo del altiplano, en donde hay una fuerte tradición de capricultores, reciban un paso justo por los animalitos que venden.