4 destinos naturales en Yucatán para encontrar paz y silencio
Los destinos turísticos de Yucatán son muy atractivos para personas de todos el mundo, pero la llegada de miles de visitantes los vuelve lugares con multitudes, ajetreo y mucho ruido, donde no hay lugar para la paz y el silencio.
Son pocas las playas, zonas arqueológicas, pueblos mágicos y cenotes, en los que se puede disfrutar con tranquilidad, para reconectar con la naturaleza, como un escape a las actividades turísticas masivas.
¿Cuáles son los destinos de Yucatán para encontrar paz y silencio?
Sin el estrés de las grandes ciudades, completamente desconectados de dispositivos electrónicos, en busca del bienestar emocional y para poner en calma la mente, estos destinos de Yucatán son perfectos para el turismo silencioso.
- Cenote Xooch: en el oriente de Yucatán, se encuentra este pozo natural, al que llega pedaleando por un camino de 5 kilómetros y en donde el único ruido es el del agua y de la selva.
- Celestún: fuera de temporada, este puerto puede ser perfecto para unas vacaciones tranquilas y silenciosas, pues un recorrido en lancha al amanecer, puede ser perfecto para meditar.
- Kulubá: ubicada en Tizimín, esta zona arqueológica es casi desconocida y recibe a muy pocos visitantes al año, pese a su importancia histórica y la belleza de sus edificios.
- Aktún Usil: estas grutas naturales todavía no han sido descubiertas por el turismo masivo. Se encuentran rodeadas de selva y silencio. Uno de sus atractivos son jeroglíficos mayas en las rocas.
¿Qué es el turismo silencioso?
Dentro del turismo sostenible, hay una tendencia emergente que tiene como prioridad el silencio, la introspección, el respeto al entorno y la desconexión tecnológica; en el que se incluyen actividades contemplativas.
El turismo silencioso se encuentra cada vez más en crecimiento, pues muchas personas buscan irse de vacaciones y conocer nuevos lugares, pero fuera de los destinos de moda, en su mayoría, multitudinarios.
En una sociedad cada vez más preocupada por tener llena la agenda y enfocada en hacer lo más posible en menos tiempo, este tipo de turismo responde a la necesidad de detenerse y de tomarse un respiro.
¿Cómo hacer un viaje silencioso?
No hace faltar irse demasiado lejos para tener un viaje silencioso, que ayude a reconectar, reflexionar y poner una pausa el ritmo de vida, pues con una simple caminata en un lugar apartado de la ciudad es un buen comienzo.
Una de las principales recomendaciones es viajar fuera de temporada alta, por ejemplo, evitar las playas en verano, para así encontrarlas sin tanta gente, mucho más limpias y así poder disfrutar con más tranquilidad.
En el caso de las zonas arqueológicas de Yucatán, se puede elegir las menos conocidas como Chacmultún o Ek Balam, lo que hace más posible que encuentres un lugar con muy pocas personas y menos bullicio.
Parte de silenciar un viaje es no llevar aparatos como teléfonos celulares, relojes inteligentes o tabletas; a lo mejor, es buena opción un lector electrónico para viajar ligero, sin tener que andar cargando libros pesados.
Ya en el lugar incluye actividades como meditación, clases de yoga, avistamiento de aves, lectura, escribir un diario y sobre todo, respetar el entorno y respirar profundo.