Muerte de joven en centro de rehabilitación en Umán termina con la detención de 6 personas
La muerte de un joven interno en un centro de rehabilitación de Umán, Yucatán, ha derivado en la detención de seis personas, señaladas como presuntas responsables del hecho. La víctima, identificada como David Israel M. S., de 21 años, falleció el pasado 15 de julio tras ser sometido a una práctica violenta conocida como “la alacraneada”.
¿Qué ocurrió en el centro de rehabilitación de Umán?
Según las investigaciones de la Policía Estatal de Investigación (PEI) y la Fiscalía General del Estado (FGE), David Israel fue inmovilizado boca abajo, con las manos y pies atados y una almohada sobre el rostro, lo que provocó su muerte por asfixia mecánica por sofocación, de acuerdo con el dictamen forense.
La práctica, conocida entre internos como “la alacraneada”, ha sido señalada como un castigo o forma de “control” dentro del centro ubicado en el centro de Umán, en la calle 18 por 27 y 29. La denuncia fue presentada por la madre del joven, quien exigió justicia ante lo ocurrido.
¿Quiénes son los detenidos por la muerte del joven?
Las autoridades cumplieron con una orden de aprehensión emitida por un Juez de Control. Los detenidos, ya puestos a disposición judicial, son:
- Wílbert Ismael “N”, de 54 años, originario de Mérida y director del centro.
- Denis Israel “N”, de 35 años, exinterno y encargado del lugar, originario de Umán.
- José “N”, de 38 años, originario de Cancún.
- Jesús Enrique “N”, de 24 años, originario de Puebla.
- Christopher Jeovany “N”, de 30 años, de Ciudad del Carmen.
- Gerardo Javier “N”, de 25 años, de Mérida.
Todos enfrentarán cargos relacionados con homicidio calificado, y se continuará con el proceso legal correspondiente.
¿Qué medidas se están tomando ante este caso en Yucatán?
La muerte de David Israel ha generado indignación en la comunidad de Umán y en todo Yucatán, donde se ha reforzado la supervisión de centros de rehabilitación, también conocidos como “anexos”. Autoridades locales han reiterado su compromiso con garantizar los derechos humanos dentro de estas instituciones, muchas veces operadas sin supervisión adecuada.
Este caso vuelve a poner en el centro del debate la necesidad de regular y monitorear estrictamente estos centros, para evitar que tragedias como esta se repitan.
