Lo mejor de la información de Nuevo León, México y el mundo
Facebook POSTA header X POSTA header Instagram POSTA header Youtube POSTA header TikTok POSTA header
CLARA VILLARREAL

¿Imagen o Percepción?

Por: CLARA VILLARREAL

Publicado el

La vendimia

¡Lle´vele, lle´vele!

&feature=youtu.be

Nos topamos con pared. A un año y medio de que nuestros hijos se han quedado en casa y hemos logrado colarlos en las casas de algunos de sus amiguitos, alguna pequeña reunión, en quintas o excursiones para mantenerlos en una dinámica que los aleje de la monotonía del hogar, muchos de nosotros no nos hemos hecho conscientes de que fue lo que vino a enseñarnos como padres la pandemia. 

Un día, el hijo mayor de unos amigos muy queridos les pidió que le compraran un juguete relativamente caro a lo cual le explicaron que no se lo podían dar en ese momento porque costaba mucho dinero. El niño respondió que qué podía hacer para ganar dinero. Trabajar, le respondieron.

Después de discutir algunas opciones y explorar un par de ejercicios, el chico de 8 años empezó un proyecto este verano que ha continuado a la fecha. Cada viernes por la tarde va al negocio de su padre y le vende bolis a los empleados a quienes “se les descuenta por nómina”, lo pongo entre comillas, porque el padre se encarga de dicho pago. El pequeño apunta los nombres de todos los que le compraron su mercancía y luego pasa a cobrar en caja chica.

Cada viernes ha ido variando la venta. En una ocasión decidió llevar una canasta de dulces y arroz con leche, pero como no podía cargar con todo, contrató a sus hermanos de 4 y 3 años a que lo apoyaran con la venta, considerándolos con un pago a cada uno por dicha ayuda. Al igual le hace un pago a la abuela por que esta se encarga de hornearle algunas galletas y a cocinarle el arroz con leche.

Lo que comenzó como una actividad de verano se ha convertido en una experiencia llena de aprendizajes para toda la familia.

Mateo comienza a familiarizarse con conceptos como gasto, ingreso, ganancia e inversión. Y todavía mejor... empieza a aprender a ser paciente cuando se tarda en colocar todos los dulces, a ser creativo para ofrecer productos distintos, a ahorrar, a ser prudente con los gastos y hasta a manejar la frustración cuando no logra venderlo todo.

En esta temporada en que la escuela y los niños han pasado por tantos cambios, como familia podemos encontrar otras oportunidades para crear experiencias de aprendizaje. Comparto la experiencia de Mateo y su familia como una mera referencia, pues estoy segura que cada familia podrá desarrollar alguna actividad adecuada a su necesidad y contexto, a fin de darle a los niños otra oportunidad para seguir, creciendo y aprendiendo aunque los tengamos lejos de las escuelas y la incertidumbre si regresaran o no a las aulas.

No olvides que la mejor educación que reciben tus hijos es el ejemplo que les das desde casa, ahora es cuando, no quieras educarlos cuando tomen decisiones por cuenta propia, porque ahí será demasiado tarde. Ahora es cuando!

¡Llévele, llévele!!!

Twitter: @claravillarreal 

contacto@claravillarreal.com 

Comparte esta nota Copiar Liga
URL copiada al portapapeles