BCS registra 127 denuncias por violación en el primer semestre de 2025

El Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) informa que Baja California Sur está en el lugar número cinco de denuncias por violación a nivel nacional, en el primer semestre de este 2025.

La media península registra no sólo este tipo de delitos, también una alto índice de ejecuciones desde hace 3 meses, pero las autoridades, desde la presidente Claudia Sheinbaum, hasta el propio gobernador Víctor Castro Cosío, han minimizado el impacto de la inseguridad en la entidad.

¿Cuáles son los números en el delito de violación en BCS?

El informe “Incidencia Delictiva y Llamadas de Emergencia al 911” del SESNSP emite los datos de denuncias de violación ante la Procuraduría General de Justicia del Estado, en relación por cada 100 mil mujeres, niñas y adolescentes.

En el primer semestre de este año, Baja California Sur acumuló un total de 127 denuncias por violación simple y equiparable, con una tasa de 14.05 casos por cada 100 mil mujeres; en comparación con el mismo periodo, pero de 2024, hay un aumento del 4.10, pues el año pasado se registraron 122 denuncias.

A nivel nacional, esta entidad quedó en quinto lugar nacional por debajo de los estados de Chihuahua (19.61), Quintana Roo (16.84), Campeche (15.54) e Hidalgo (14.21).

¿Se han realizado estrategias para prevenir esta violencia en BCS?

Desde el Gobierno del Estado, replicado en varias dependencias, se realizó la campaña "Párale a la violencia" que buscaba disminuir los indicadores de violencia hacia las mujeres.

Aunque no se tiene una estadística comparativa, en medios y redes sociales se ha cuestionado la efectividad de una campaña que ha funcionado más como slogan que como estrategia efectiva.

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¿En qué otras esferas se da la violencia sexual?

En la actualidad, la violación a la intimidad, y la violencia en que se inducen las relaciones, también están presentes en los dispositivos móviles, redes sociales y publicaciones en Internet; es amplio el espectro de conductas que van desde compartir sin permiso imágenes explícitas, hasta fingir una relación amistosa para realizar un abuso sexual.

Si se habla sólo de violencia digital, según la Policía Estatal Cibernética, estas conductas agresivas comienzan a escalar con acciones como monitorear constantemente a la pareja en redes sociales, revisar los dispositivos de la pareja y exigirles contraseñas, entre otras.