Este parque es uno de los pulmones verdes más antiguos de Torreón, data desde 1930
En pleno corazón de Torreón, el Bosque Venustiano Carranza se ha consolidado como uno de los lugares más representativos de la ciudad.
Su historia, que se remonta a la década de 1930, lo convierte en el pulmón verde más antiguo de la región, al mismo tiempo que funciona como un espacio recreativo, deportivo y cultural para los laguneros.
Creado en 1939 e inaugurado oficialmente en 1941, este parque nació de un esfuerzo colectivo por rescatar terrenos deteriorados y transformarlos en un área verde de gran valor ecológico. Desde entonces, ha sido un punto de encuentro para generaciones enteras y un factor clave para la conservación ambiental dentro de la mancha urbana.
¿Cómo se originó el Bosque Venustiano Carranza?
El terreno donde hoy se levanta pertenecía al Ferrocarril Coahuila Pacífico y se encontraba en malas condiciones. Fue gracias a la gestión del ingeniero José González Calderón que el espacio pasó a manos del gobierno estatal, encabezado entonces por Pedro Rodríguez Triana, quien aprobó su donación en 1939.
Dos años más tarde, se llevó a cabo una plantación masiva de 18 mil árboles, entre los que destacaban eucaliptos, sicomoros, cedros, naranjos, palmas y aguacateros. Con ello, comenzó la transformación de un terreno baldío en un parque icónico.
¿Qué importancia tiene hoy para la ecología urbana?
El Bosque Venustiano Carranza funciona como un regulador natural de la calidad del aire, al capturar carbono y ayudar a mitigar los efectos de la contaminación.
Además, sirve como refugio para aves y pequeños mamíferos, favoreciendo la biodiversidad en una ciudad en constante crecimiento.
Este espacio también brinda a la población un lugar accesible para ejercitarse, convivir y disfrutar de actividades al aire libre, lo que lo convierte en un elemento vital para la salud física y emocional de los torreonenses.
¿Qué actividades y espacios ofrece a los visitantes?
A lo largo de su historia, el parque ha albergado eventos cívicos, culturales y deportivos. En sus instalaciones destacan caminos arbolados, pérgolas, una noria y hasta un obelisco conmemorativo. Aunque proyectos como la construcción de un lago no se materializaron, el bosque continúa siendo un sitio de identidad y tradición para la comunidad.
Actualmente, es punto de reunión para corredores, ciclistas y familias que encuentran en sus áreas verdes un espacio de convivencia y descanso.