Elisa Carrillo vuelve al Bolero: la danza como rito y legado en el Auditorio Nacional
El Auditorio Nacional volverá a estremecerse el 27 de mayo de 2025, cuando Elisa Carrillo Cabrera, la primera bailarina del Staatsballett Berlin, haga vibrar el escenario con el “Bolero” de Maurice Béjart, una de las piezas más electrizantes de la danza contemporánea.
En esta decimoquinta edición de la Gala Elisa y Amigos, el arte se elevará a su máxima potencia. Pero más allá del brillo escénico, hay una historia viva que se respira en cada ensayo.
POSTA estuvo presente el lunes 25 de mayo, en un ensayo íntimo y poderoso, donde Elisa no solo afinó su coreografía, sino que compartió su conocimiento con más de 40 jóvenes bailarines. Entre pliegues, giros y consejos, dejó claro que su legado va más allá del aplauso: es una llama que busca encender nuevas vocaciones.
El Bolero, esa ceremonia que transforma cuerpos en emoción
La obra que Elisa volverá a interpretar no es cualquier coreografía. “Bolero”, creada en 1961 por Maurice Béjart sobre la partitura hipnótica de Maurice Ravel, es una prueba de fuego para cualquier intérprete: una danza que exige pasión, precisión, resistencia y una entrega total.
“El Bolero no es solo una coreografía, es un ritual de pasión y entrega absoluta. Es el corazón latiendo al ritmo de la música, una energía que crece y envuelve a todos en un éxtasis inigualable”, dijo Elisa Carrillo, mientras afinaba cada movimiento con la intensidad de quien vive la danza como un acto sagrado.
En escena, no estará sola. La acompañarán figuras del ballet internacional, consolidando a la Gala Elisa y Amigos como uno de los eventos dancísticos más importantes del país.
Elisa Carrillo, la mexicana que conquistó el mundo… y lo comparte
Elisa no solo baila, también inspira. Es la única mexicana y la primera latinoamericana en haber obtenido los tres premios más prestigiosos de la danza internacional: Prix Benois de la Danse, Alma de la Danza y el Festival Dance Open.
Además de su indiscutible talento, Carrillo ha tejido una red de colaboración y enseñanza a través de su fundación, con la cual busca formar nuevas generaciones de bailarines mexicanos. Su trabajo no termina en el escenario: lo prolonga en la entrega, la guía, el ejemplo.
En los ensayos previos a la gala, se le vio reír, abrazar, corregir suavemente posturas, motivar con palabras simples pero profundas. Allí, en esos momentos ajenos al reflector, Carrillo mostró una faceta aún más admirable: la de maestra generosa y luminosa.
Una función única que podría no repetirse
La presentación de este 27 de mayo no será una más. Es posible que sea la última vez que “Bolero” de Béjart sea interpretado por Elisa en un escenario mexicano. Para los amantes del ballet, es una oportunidad irrepetible.
La función tendrá lugar en el Auditorio Nacional a las 20:30 hrs. Los boletos están disponibles en taquillas y a través de Ticketmaster.