"Encontré al Diablo": un sangriento relato de venganza
En ocasiones, el cine coreano ha logrado explorar los rincones más perturbadores de las personas, llevando a los espectadores de total intriga. Ese tipo de historias se han mantenido en el imaginario colectivo, hasta volverlas en un clásico a pesar de haberse estrenado hace años.
Un ejemplo perfecto de esto fue "Encontré al Diablo", una película que dominada por acción, suspenso y violencia psicológica de una forma que pocos filmes se atreven, cambió para siempre a la industria, definiendo a una nueva generación de historias que llegaron en un futuro.
¿De qué trata "Encontré al Diablo"?
La trama sigue a "Soo-hyun", un agente secreto que tras la perdida de su prometida a manos de un asesino serial, decide tomar venganza por mano propia, donde el protagonista revela ante el responsable que detrás de él también existe una personalidad sombría que tal vez estaba oculta en su interior durante mucho tiempo.
Un argumento que invita al espectador a reflexionar, sobre que tan cercanos podemos estar a esas personas que nos hicieron daño, cuando nos dejamos consumir por el odio y el rencor en todo momento.
¿Quién es el equipo detrás de "Encontré al Diablo"?
La cinta fue dirigida por Kim Jee-woon, recordado por su trabajo en "El bueno, el malo y el raro" y el guion estuvo a cargo de Park Hoon-jung, quien después iniciaría su camino como creador en solitario.
Su elenco está encabezado por Lee Byung-hun, actor que recientemente interpretó al "El Líder" en "El Juego del Calamar" y Choi Min-sik, recordado mundialmente por"Oldboy”, otro clásico de culto.
¿Por qué "Encontré al Diablo" se volvió una película de culto?
El filme recibió muchas críticas positivas a nivel internacional, aunque su crudeza narrativa generó polémica en Corea ya que anteriormente no se había visto algo del estilo. Aunque eso mismo la convirtió en un futuro en una pionera dentro de la cinematografía asiática .
Con el paso de los años, la cinta ha sido proyectada en festivales de cine y revisitada por críticos, quienes la consideran una de las películas más influyentes de los 2000, sigue siendo un ejemplo de como el cine puede incomodar y al mismo tiempo hacer reflexionar a sus audiencias de forma audaz.