Avanza cierre de zanja en avenida López Mateos tras mega fuga en Guadalupe
La semana comenzó con una emergencia hidráulica de gran magnitud en el municipio de Guadalupe, luego de que el lunes 17 de noviembre se registrara una ruptura en una tubería de 48 pulgadas ubicada sobre la avenida Adolfo López Mateos, en la colonia Colibrí.
La fuga generó una considerable salida de agua potable, afectó la circulación vial y dejó sin servicio a numerosas colonias en Guadalupe, Apodaca y San Nicolás.
¿Qué trabajos realiza Agua y Drenaje este miércoles?
Este miércoles 19 de noviembre, Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey (AyD) informó que los trabajos de reparación concluyeron y que las cuadrillas operativas se encuentran actualmente en el proceso de cierre de la zanjas, etapa previa a la reposición del pavimento y a la normalización total de la vialidad.
El organismo agradeció a las y los vecinos su comprensión ante las afectaciones derivadas de los trabajos, que se llevaron a cabo de manera continua durante los últimos tres días.
¿Qué provocó la ruptura de la tubería de 48 pulgadas?
De acuerdo con reportes técnicos preliminares, la fractura se registró en una línea de conducción primaria que abastece a diversos sectores habitacionales.
Aunque la autoridad no ha emitido un dictamen definitivo, las primeras evaluaciones apuntan a un deterioro acumulado por antigüedad y a variaciones de presión en la red, factores que ya han sido señalados en incidentes previos.
La magnitud de la fuga derivó en la salida de miles de litros de agua potable y debilitó el pavimento en el tramo afectado, lo que obligó al cierre total de un sector de la avenida López Mateos.
Diversos reportes estimaron que entre 339 y 385 colonias resultaron afectadas por la suspensión del servicio.
¿Qué trabajos realizó Agua y Drenaje desde el lunes?
El personal operativo efectuó excavaciones profundas para acceder a la estructura dañada , sustituyó el tramo comprometido de la tubería y reforzó la línea a fin de incrementar su estabilidad.
Posteriormente, se inició el relleno y la compactación del área intervenida, una fase clave para garantizar la seguridad de la vialidad y evitar futuros hundimientos.