Regiomontanos se conectan con la naturaleza de Nuevo León en puente por Día de la Independencia
Con motivo del puente por el Día de la Independencia, cientos de regiomontanos decidieron salir de la rutina urbana y aprovechar la riqueza natural del estado.
Desde las Cascadas de Guadalupe hasta el imponente Cerro de la Silla y el Parque Ecológico La Estanzuela, las familias y grupos de amigos encontraron en estos parajes un respiro y una oportunidad de convivencia al aire libre.
¿Por qué los regios eligieron la naturaleza en este puente?
La combinación de días de descanso, clima agradable y el deseo de desconectarse de la ciudad motivó a muchas familias a visitar los atractivos naturales de Nuevo León. Estos lugares ofrecen espacios para el senderismo, la fotografía y la convivencia con la naturaleza.
Las Cascadas de Guadalupe, ubicadas en el municipio de Guadalupe, se convirtieron en una de las principales opciones para quienes buscan agua y paisajes verdes.
El Cerro de la Silla, símbolo de Nuevfo León, atrajo a excursionistas y deportistas que aprovecharon el tiempo libre para escalar y disfrutar de sus vistas panorámicas.
¿Qué lugares fueron los más visitados durante el puente?
De acuerdo con recorridos y testimonios, tres sitios destacaron por su afluencia:
- Cascadas de Guadalupe: un espacio refrescante ideal para quienes buscan contacto directo con el agua.
- Cerro de la Silla: ícono de Nuevo León que combina deporte y turismo local.
- Parque Ecológico La Estanzuela: ubicado en la Sierra Madre, es un punto perfecto para el senderismo y la observación de flora y fauna.
Estos destinos, además de su cercanía con la zona metropolitana, resultan accesibles y familiares para los visitantes.
¿Qué beneficios aportan estas visitas a la comunidad?
Más allá del entretenimiento, estas escapadas al aire libre fomentan la salud física y emocional, ya que ofrecen un respiro frente al ritmo acelerado de la ciudad.
También generan un impacto positivo en la economía local, pues muchas familias complementaron sus recorridos con visitas a restaurantes, mercados y negocios cercanos.
De esta manera, el puente no solo fue un descanso laboral, sino una oportunidad para reconectar con el entorno natural de Nuevo León y fortalecer el sentido de comunidad entre los regiomontanos.
