5 consejos para evitar que la ola de calor afecte a tus mascotas
Llegó por adelantado una intensa ola de calor en México, casi generalizada y con afectación en 23 de los 32 estados, lo que representa un riesgo tanto para las personas como para las mascotas.
Las altas temperaturas pueden provocar golpes de calor en los seres humanos, pero también en los perros y gatos, lo que se convierte en una condición peligrosa que debe prevenirse con medidas muy puntuales.
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Especialistas han hecho una serie de recomendaciones para evitar que los animalitos sufran deshidratación y otras complicaciones por las altas temperaturas.
¿Cuáles son las recomendaciones para mantener hidratado al perro?
- Preparar “heladitos” caseros con fruta natural o caldo (sin sal).
- Utilizar tapetes fríos o colocar hielos en el recipiente de donde toma el agua para mantenerla a baja temperatura por más tiempo.
- Mojar al perro en la cabeza, lomo, panza, axilas y entre las piernas, e incluso recurrir a la camiseta mojada bien exprimida para ayudarle a regular su temperatura.
- Usa collares especiales refrigerantes, están hechos justo para perros y gatos; darle juguetes o mordederas congeladas o frías.
- Si se tiene espacio en la casa, se puede usar una alberca infantil para que se remoje.
¿Qué hábitos se deben tener con la mascota?
Como parte de los cuidados que debe tener el humano con su mascota y para evitar riesgos:
- Se le debe tener siempre agua limpia y fresca para que tome cuanto sea necesario.
- Evitar los paseos entre las 12:00 y las 17:00 horas, con lo caliente del pavimento puede quemarse las patas.
- Si está en el patio, el jardín o algún oro sitio fuera de la casa, asegurarse de que tenga sombra y buena ventilación.
- Si lo sacan a pasear no dejarlo solo dentro del carro con las ventanas cerradas.
¿Cuáles son los síntomas del golpe de calor en las mascotas?
Un perro cuando sufre golpe de calor suele presentar las siguientes manifestaciones :
- Jadear en exceso
- Lucir muy cansado
- Sin ganas de moverse
- La lengua está roja e inflamada
Ante cualquiera de estos síntomas es urgente acudir al veterinario de inmediato para que lo atiendan y le bajen la temperatura, evitando así complicaciones que, en casos extremos, pueden derivar en la muerte.
