Guía práctica para impermeabilizar tus paredes con cemento de manera sencilla

El mortero impermeabilizante se ha convertido en un aliado esencial en la construcción tradicional para proteger las paredes de la humedad, sobre todo en temporada de lluvias.

Combinando elementos como el cemento con aditivos hidrorepelentes, este tipo de mortero crea una barrera efectiva contra el agua. Así, la durabilidad de las estructuras se ve significativamente mejorada.

¿Qué es el cemento impermeable?

El cemento impermeabilizante se ha convertido en una solución clave en la construcción moderna, tanto en levantamiento de casas, como en edificios y otro tipo de inmuebles. 

Este tipo de mortero evita que el agua penetre desde el inicio del proyecto, protegiendo así las estructuras de la humedad y evitando problemas como la pintura descascarada.

Ideal para construcciones expuestas a las inclemencias del tiempo, el mortero impermeable salvaguarda muros, cimientos y techos.

Su aplicación es crucial, especialmente al revocar paredes exteriores, donde establece una barrera efectiva contra la humedad.

¿Cómo se aplica correctamente el concreto impermeable?

Para obtener su máxima efectividad, es fundamental seguir de manera apegada las instrucciones al mezclar y aplicar el producto.

Si se ignoran estas pautas, el resultado podría no cumplir con las expectativas y la impermeabilización podría verse comprometida.

Impermeabilizar correctamente las paredes es esencial para prevenir problemas de humedad. Un error común es la incorrecta dosis de los materiales.

Para el cemento impermeabilizante, la proporción ideal es de 1 parte de cemento por 4 de arena, teniendo en cuenta que se refiere a volúmenes.

¿Qué es el hidrófugo?

El hidrófugo es un aditivo que potencia las propiedades impermeabilizantes del cemento. Este material se mezcla con agua en una proporción de 1 parte de hidrófugo por 10 de agua.

Respetar estas medidas es crucial para asegurar la eficacia del producto y evitar filtraciones futuras.

Una vez preparada el agua con el hidrófugo, se emplea para mezclar con la arena y el cemento. Utilizar un mezclador eléctrico garantiza que la mezcla sea homogénea y fácil de aplicar.

Así, se consigue una pasta lo suficientemente efectiva que logrará optimizar la resistencia a la humedad en tus paredes, además de evitar las grietas que se pueden hacer debido a ésta.

¿Qué recomendaciones seguir para aplicar el cemento impermeable?

Cuando se trata de aplicar cemento impermeabilizante, es esencial conocer algunos aspectos clave para asegurar un buen resultado y así prevenir problemas de humedad en el futuro. 

Aquí te dejamos algunos consejos útiles para que tu aplicación sea perfecta:

• Espesor adecuado: Asegúrate de que la capa de cemento tenga entre 5 y 8 mm de grosor para garantizar su eficacia. Si la aplicas demasiado delgada, perderás su capacidad de impermeabilización.
• Evitar la presión excesiva: No ejerzas demasiada presión al extender el mortero. Esto puede hacer que se reduzca su espesor, comprometiendo su habilidad para proteger contra la humedad.
• Hidratación de las paredes: Antes de aplicar el cemento, es fundamental humedecer bien las paredes que vas a cubrir. Esto ayuda a que la mezcla reaccione correctamente y se adhiera mejor.

• Mezcla equilibrada: Utiliza una proporción de cemento a arena de 1:4 para obtener los mejores resultados. Esta mezcla es clave para la resistencia y la impermeabilidad del mortero.
• Cuidado con el fraguado: Mantén la mezcla hidratada durante el fraguado, ya que el agua es crucial en este proceso. Si se evapora antes de tiempo, el mortero podría perder su efectividad.
• Tiempo de fraguado: Dale a la mezcla el tiempo necesario para fraguar correctamente. Esta reacción química es vital para que el cemento adquiera la dureza y propiedades impermeabilizantes necesarias.

Con estos consejos, estarás más preparado para realizar una aplicación efectiva del cemento impermeabilizante.