”El Chueco" de Victoria: De la Baja Autoestima a Figura Viral y Campeón Paralímpico
Ciudad Victoria tiene un nuevo creador de contenido en redes sociales cuya historia va más allá de un apodo: Jorge Adrián Alvarado Vargas, mejor conocido como "El Chueco".
A sus 31 años, este joven victorense ha logrado convertirse en una figura viral en la capital y municipios aledaños.
En una plática en POSTA Líderes, Jorge Alvarado detalló su camino, desde los complejos personales generados por su condición de escoliosis congénita (de nacimiento) hasta su transformación en un campeón deportivo y creador de contenido.
Su narrativa es un fuerte mensaje sobre el poder de la autoaceptación y la humildad como motor de superación.
¿Cuál fue el origen de su apodo y cómo influyó en su autoestima?
El sobrenombre que ahora lo identifica como figura pública nació en la universidad.
Jorge, quien cargaba con una fuerte baja autoestima debido a su condición física, encontró en un amigo de la liga de fútbol americano, Lenin Ontiveros, una figura de hermano y protector.
Fue Lenin quien comenzó a llamarlo "Choquito" y, a partir de ese momento, el apodo se popularizó.
Aunque en un principio le costó asimilarlo, hoy lo ve como un "alter ego" y un personaje que ha abrazado.
De hecho, asegura que si pudiera operarse (es alérgico a la anestesia), no lo haría, pues eso "acabaría con la magia del Chueco".
¿Qué es la escoliosis congénita y cómo marcó su niñez?
Su condición es la escoliosis congénita, una curvatura de la columna vertebral presente desde el nacimiento.
Aunque fue intervenido de niño (le pusieron una barra que debió ser cambiada), el riesgo de la anestesia impidió correcciones posteriores.
Su niñez estuvo marcada por las miradas de adultos y niños que lo llevaron a encerrarse en casa.
Sentía que la protección de su familia era excesiva y, aunque agradecida, lo hacía sentirse "inútil". Sin embargo, gracias al apoyo familiar, comenzó a salir, siendo el estadio su primer espacio de esparcimiento.
¿Qué experiencia lo ayudó a superar la timidez y la sobreprotección?
El punto de inflexión para superar la sobreprotección familiar y su timidez llegó cuando, a los 14 o 15 años, su madre lo invitó a moverse solo en microbús.
Pero el verdadero cambio mental ocurrió en la secundaria, cuando el profesor Ángel Tovar, entrenador de atletas paralímpicos, lo invitó a practicar deporte.
Al asistir a una competencia nacional en Sonora, Jorge vio a otros atletas con discapacidades severas (silla de ruedas, amputaciones) que, sin embargo, eran felices y vivían sin complejos. "Yo nomás estoy chueco, pero tengo todo", reflexionó, dándose cuenta de su potencial.
¿Cómo pasó de ser atleta paralímpico a incursionar en el fisicoculturismo?
Como atleta paralímpico, Jorge fue campeón nacional durante cuatro años seguidos en lanzamiento de bala y jabalina. Incluso dio la marca para una concentración de CONADE con miras a los Juegos Panamericanos, aunque su falta de seguridad personal en ese momento lo hizo dudar ante una psicóloga.
Años más tarde, ya trabajando en un gimnasio, dos instructores lo animaron a subir a la tarima de fisicoculturismo.
Lo que comenzó como un reto personal se convirtió en un boom que le dio notoriedad en la prensa local. Actualmente compite a nivel exhibición, llegando a la Copa Lalo en Monterrey, y aspira a participar en Mr. México.
¿Cómo maneja su creciente fama y las invitaciones a colaborar en redes sociales?
Jorge Alvarado relata que, después de un error personal y cinco años de aprendizaje, ha regresado a las redes con una mentalidad de humildad.
A pesar de su aumento de seguidores, se niega a cobrar por publicidad, especialmente a quienes están iniciando. "Se me hace una tontería cobrar por una publicidad en redes sociales", asegura.
Su filosofía es de reciprocidad: él fue apoyado al inicio, por lo que debe hacer lo mismo. Esta actitud, combinada con su personalidad abierta y carismática, es la que le ha abierto más puertas, incluyendo colaboraciones con negocios locales.