Reforestan mangle en Tamaulipas para enfrentar el cambio climático y proteger la costa
El mangle vuelve a cobrar protagonismo en las costas de Tamaulipas. Ante los efectos cada vez más visibles del calentamiento global, el gobierno estatal impulsa la reforestación de este ecosistema costero como parte de una estrategia integral de mitigación.
Humberto Calderón Zúñiga, director de Políticas para el Cambio Climático en el estado, explicó que estas acciones buscan amortiguar los impactos ya irreversibles del fenómeno climático, como las sequías prolongadas o las lluvias atípicas que cada año afectan más a la entidad.
¿Por qué es tan importante el mangle en la lucha climática?
El mangle es una de las especies vegetales más eficientes en la captura de dióxido de carbono, el principal gas causante del efecto invernadero. Además, su sistema radicular ayuda a estabilizar los suelos y proteger la línea costera contra la erosión y el embate de tormentas y huracanes.
“Es una barrera natural que protege a la población y a los ecosistemas costeros”, explicó Calderón Zúñiga, al destacar que también es refugio de múltiples especies marinas y aves.
¿Qué otras zonas están siendo reforestadas en Tamaulipas?
Además de la costa, la estrategia ambiental del estado también contempla la reforestación de zonas boscosas, especialmente en áreas clave como la Reserva de la Biósfera El Cielo, en el sur de Tamaulipas.
Esta región, considerada el pulmón del estado, es crucial porque ahí nacen ríos que abastecen de agua a zonas como la conurbación de Tampico, Madero y Altamira.
“Si cuidamos de estos espacios naturales, cuidamos también la disponibilidad de agua para miles de familias tamaulipecas”, afirmó el funcionario.
¿Qué otras medidas impulsa el gobierno estatal frente al cambio climático?
Como parte de una visión integral, se están implementando medidas fiscales como el impuesto verde, que busca responsabilizar a las empresas por sus emisiones contaminantes. La intención es incentivar prácticas industriales más limpias y menos dañinas para el medio ambiente.
“El cambio climático no se puede detener, pero sí podemos adaptarnos con acciones bien pensadas”, concluyó Calderón Zúñiga, haciendo un llamado a la participación ciudadana para proteger los ecosistemas y mitigar el daño ambiental desde lo local.