Dulces tradicionales en Yucatán: una degustación mexicana al paladar
En septiembre, cuando las calles de México se llenan de luces tricolores, música de mariachi y aroma a antojitos, en Yucatán también hay un toque dulce que no puede faltar en las mesas familiares: los dulces típicos yucatecos.
Cocadas, pepitas, merengues, tamarindos, mazapanes y papayas cristalizadas se convierten en parte de la celebración, recordando que la identidad mexicana también se saborea.
En las Fiestas Patrias, no solo los platillos fuertes como los chiles en nogada o la cochinita pibil forman parte del festejo; los dulces tradicionales son el broche de oro que acompaña la convivencia y que, con sus colores y sabores, evocan la unión entre pasado y presente.
¿Qué dulces se disfrutan en septiembre en Yucatán?
Entre los más buscados están las cocadas de colores, que evocan la bandera con sus tonos verde, blanco y rojo; los merengues, que endulzan las reuniones familiares, y el dulce de pepita, moldeado en figuras que atraen a grandes y pequeños.
También destacan las frutas cristalizadas —papaya, ciricote o camote—, que aportan un toque vistoso a la mesa, junto con las obleas rellenas de pepita y las melcochas, que aún se venden en ferias y kermeses. Cada uno no solo satisface el antojo, sino que forma parte de una tradición compartida generación tras generación.
En el mercado Lucas de Gálvez, en Mérida, ya se pueden encontrar estos dulces típicos; sin embargo, los vendedores reportaron bajas ventas.
Estamos muy cerca del 16 y las ventas están cañonsísimas, nada que ver como en años pasados, pero ahí estamos al pie del cañón.
Perla Medina - Comerciante de dulces típicos
¿Dónde se viven estas tradiciones durante las Fiestas Patrias?
Las plazas y mercados de Mérida se llenan de puestos adornados con papel picado y luces tricolores, donde los vendedores ofrecen dulces envueltos en bolsitas decoradas.
El mercado Lucas de Gálvez se convierte en punto de encuentro para quienes buscan llevar a casa un poco de este sabor artesanal.
En los barrios tradicionales y comisarías, durante las verbenas populares y las noches del Grito de Independencia, los puestos de antojitos siempre reservan un lugar especial para las cocadas y los merengues.
Es común ver a las familias salir con una bandera en mano y una bolsa de dulces en la otra, celebrando el orgullo de ser mexicanos.
¿Por qué son un símbolo de identidad en estas fechas?
Los dulces tradicionales yucatecos representan la mezcla cultural que dio forma a México. Ingredientes de origen maya como la pepita y la miel se combinan con el azúcar y el coco, traídos desde otros continentes, para dar vida a una repostería artesanal que hoy endulza las celebraciones patrias.
Más allá de lo gastronómico, cada dulce cuenta una historia; la del abuelo que compraba merenguitos después del desfile, la de las ferias de pueblo donde se compartían cocadas, o la de la abuela que guardaba pepitas para sorprender a los nietos en las fiestas.
En cada bocado hay un pedazo de historia, de familia y de orgullo mexicano.