Por esta razón no llegan ballenas a las costas de Yucatán
Las ballenas son de los animales más grandes del mundo y ver una de cerca es todo un espectáculo que ocurre en algunas partes de México, sobre todo en las costas del Pacífico, pero es imposible el avistamiento en Yucatán.
Destinos como Baja California, Nayarit, Jalisco, Sinaloa, Oaxaca y Guerreros son privilegiados por la visita de estos mamíferos marinos que llegan entre los meses de diciembre a mayo de cada año.
¿Por qué no llegan ballenas a las costas de Yucatán?
Las costas de la península de Yucatán no son uno de los lugares favoritos de las ballenas, pues 8 especies que llegan al litoral mexicano para resguardarse y reproducirse en estos santuarios en los mares mexicanos.
Uno de los principales factores que hacen que no puedan verse ballenas en el Mar Caribe y el Golfo de México, son las aguas cálidas y profundas, pues estos animales migran, se alimentan y tienen a sus crías en aguas frías y templadas.
Al venir desde Alaska hasta Baja California, la ruta migratoria de las ballenas está muy lejas de las costas yucatecas, aunque algunas especies pasan por el Caribe, pero más cerca de Dominicana o Puerto Rico.
Lo más cercano son los delfines y los tiburones ballenas, que se pueden avistar en distintos puntos de la península de Yucatán, pero para ver a las ballenas hay que visitar otros destinos como Los Cabos o Huatulco.
¿Dónde ver a los tiburones ballena en la península de Yucatán?
En la península de Yucatán no solo pueden verse tiburones ballenas, sino que se puede nadar con ellos, esta experiencia es posible en la Isla de Holbox, Isla Mujeres y en Isla Contoy, todas en Quintana Roo.
Aunque para convivir de cerca con el pez más grande del mundo, hay que hacer con mucho respeto, pues no hay que tocar o montar al animal, además de hacerlo con un guía especializado y todos los permisos ambientales.
¿Dónde encontrar delfines en la península de Yucatán?
Del otro lado de la península, en el estado de Campeche, hay un santuario en la Laguna de Términos, para ver en vivo y en directo a los delfines nariz de botella durante todo el año, además de ver otras especies como aves o manatíes.
Para llegar hasta el santuario hay que hacer un viaje en lancha y se recomienda hacer el viaje entre noviembre y mayo, temporada en la que no hay mucha lluvia, aunque los delfines viven ahí y no se van a ningún lado.