Estos municipios del Edomex se salvan del aumento del agua en 2026
El Congreso del Edomex busca que los ajustes tarifarios contribuyan a la eficiencia y mantenimiento de la infraestructura hidráulica en la entidad.

A partir de enero de 2026, los usuarios del Estado de México notarán ajustes en las tarifas de agua potable, alcantarillado y tratamiento de aguas residuales, tras la aprobación del Decreto número 258 a mediados de diciembre.
¿Qué municipios aplicarán aumentos o reducciones?
No todos los municipios aplicarán cambios significativos. Solo 21 de los 125 municipios presentaron propuestas de modificación. Entre los casos más relevantes:
Coacalco: incremento del 4% para todos los usuarios, domésticos y no domésticos.
Cuautitlán: redefinición de categorías para comercios e industrias, con reducciones de hasta 22% y 14%.
Huixquilucan: aumento del 15% para un grupo específico de usuarios domésticos con medidor de nivel residencial medio, lo que permitirá recaudar alrededor de 700 mil pesos para obras de infraestructura hidráulica.
Mientras tanto, municipios como Toluca, Naucalpan, Metepec, Tlalnepantla y Cuautitlán Izcalli mantendrán sus tarifas actuales, aplicando únicamente ajustes vinculados a la inflación y la Unidad de Medida y Actualización.
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¿Por qué se implementan estos cambios?
La medida responde a solicitudes de varios municipios que buscan ajustar sus esquemas de cobro para reflejar el costo real del servicio de agua potable, alcantarillado y tratamiento de aguas residuales. Las autoridades estatales subrayan que los ajustes son necesarios para garantizar la sostenibilidad del servicio a largo plazo.
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¿Qué recomendaciones tienen las autoridades para los usuarios?
Frente a los cambios, se sugiere a los ciudadanos:
Verificar la categoría de consumo reflejada en su recibo.
Denunciar fugas o fallas en la red.
Consultar los nuevos esquemas tarifarios en su municipio.
Participar en programas de regularización de pagos.
El Congreso del Estado de México también instó a los ayuntamientos a mejorar la eficiencia en la recaudación y operación de los organismos de agua, en respuesta a problemas históricos de abasto, fugas y deterioro de la red que afectan a millones de habitantes.
Estas acciones permiten a los usuarios planificar mejor sus gastos y contribuyen al mantenimiento y expansión de la infraestructura hidráulica.
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