Eduardo Yáñez se deja ver en un evento y aclara que no está enfermo
Tras semanas de rumores sobre su salud, el actor Eduardo Yáñez reaparece en público para confirmar que se encuentra bien.
Después del silencio, llegó la calma. Eduardo Yáñez, uno de los rostros más icónicos de la televisión mexicana, reapareció ante los medios para dejar algo muy claro: no está enfermo, y lejos de eso, se encuentra en una etapa de reflexión, crecimiento y agradecimiento por lo vivido.
“Estoy bien", dice. Con la madurez que dan los años y los retos, Yáñez se permitió ir más allá de los titulares para hablar sobre lo que realmente importa: la vida, el oficio y el alma del actor.
“La actuación es la vida misma”
El actor compartió una analogía profunda entre su carrera y el propio curso de la existencia:
“La actuación es la vida misma. Vienes desde la infancia, luego la juventud, después la madurez… y si no aprendiste algo de lo que ya has vivido, tienes que ser muy soquete”.
Yáñez no se refugia en los personajes; al contrario, los deja hablar de él. A través de ellos, ha vivido otras vidas y también ha enfrentado las pausas, las caídas, los días en los que, como dice él, “nadie te contrata”.
“Hay subidas y bajadas… es parte del viaje”
Desmintiendo el glamour que muchos atribuyen a su carrera, fue directo:
“Algunos creen que hay millones y millones de pesos en esta carrera y no se dan cuenta que muchos actores hemos pasado por todo… hay subidas y bajadas”.
Sin filtros, habló de los momentos de incertidumbre y también del valor de seguir adelante sin perder la esencia. Hoy, dice, se encuentra más tranquilo, más feliz, y ha aprendido a tomar las cosas con menos drama, aunque su oficio esté lleno de él.
“El carácter nunca se pierde, solo se afina”
Con el temple de quien ha enfrentado la vida de frente, Yáñez dejó una de las frases más potentes de su conversación: “El carácter nunca lo pierdas. Es lo que te hace”.
Sin embargo, reconoce que el carácter también se moldea con el tiempo. Saber cuándo hablar, cómo reaccionar, con quién compartir el alma, es un aprendizaje que solo la experiencia otorga:
“Hay que saber cuándo y cómo, con quién, si vale la pena… si estás defendiendo tu vida, tu familia o a un gran amigo”.
Más experiencia, menos vanidad
Atrás quedó el impulso de imponer el ego. Hoy, Eduardo Yáñez ha hecho una elección consciente:
“En lugar de imponer mi vanidad o mi miedo, decidí poner la experiencia. Y eso me hace más feliz”.
Con estas palabras, el actor deja en claro que no se trata solo de seguir vigente, sino de seguir siendo fiel a sí mismo, creciendo desde adentro hacia afuera, con autenticidad.
Lejos de los rumores, Eduardo Yáñez se mantiene en movimiento. Trabaja, planea nuevos proyectos y, sobre todo, se enfoca en vivir con la dignidad que solo el aprendizaje constante puede dar.
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