DICIEMBRE 2, 2023

CARGA MENTAL

Lo cansada que estoy de sentir, y que sea cierto, que todas las responsabilidades diarias recaen sobre mi.

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Por: Carolina Hernández

Octubre 13, 2023, 23:04

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Hola qué tal, yo soy Carolina Hernández y este es Sin Esdrujulas, tu micro mini podcast / carga mental / favorito y en esta ocasión quiero compartir con ustedes lo cansada que estoy.

Lo cansada que estoy de sentir, y que sea cierto, que todas las responsabilidades diarias recaen sobre mi.

Que tengo que lidiar con la gestión de las labores de la casa, de mi familia, de mis perros, de los perros en la calle, de la crisis del agua, de querer ser vegana, de la guerra, las elecciones, el SAT…

Y además, tener claridad para hacer mi trabajo.

Como este.

Le dicen el “síndrome de la mujer agotada”, por que -por supuesto- es más común en nosotras.

De acuerdo con un estudio de P&G, el 71% de las mujeres sufre carga mental, y sólo el 12% de los hombres lo experimenta.

El término 'carga mental' apareció por primera vez en 1984 en el libro La gestión ordinaria de la vida en pareja, de la socióloga Monique Haicault.

Monique detalla que las mujeres siempre tenemos en cuenta, en nuestra mente, una larga lista de pendientes.

Y ese trabajo invisible genera gran cansancio.

Si estás de este lado de la carga del género ponte a pensar en cuántas cosas estás pensando mientras me escuchas. De hecho, justamente es muy probable que no me estés viendo porque mientras me escuchas estés haciendo otra cosa.

En el libro, Monique insiste en que lo pesado no solo es el compromiso de 'hacer', sino el peso de organizar y ser capaz de estar detrás de todo.

La carga mental es una consecuencia de la gestión de múltiples tareas vinculadas con roles culturalmente asignados y asumidos tradicionalmente por las mujeres.

Las mujeres somos multitasking nos dijeron. La más grande trampa del patriarcado.

Porque bajo esa premisa continúamos sintiéndonos las únicas responsables del buen funcionamiento de todo, porque podemos hacer muchas cosas a la vez.

Pero estamos agotadas, con los nervios a tope y sin energía.

Por si fuera poco, esta carga es por un trabajo que ni siquiera es reconocido, porque al ser un trabajo mental y cognitivo en el ámbito privado, no está cuantificado.

Cómo lo mides?

Es, en gran medida invisible y, por tanto, no es valorado ni dimensionado, incluso ni por nostras mismas.

Por eso es importante identificar nuestras cargas y repartir las responsabilidades.

Una buena forma de comenzar es haciéndonos estas preguntas:

¿Estoy haciendo esto, solo por que soy mujer? ¿estoy haciéndolo porque de verdad es mi obligación? ¿esa obligación, quién me la asignó? ¿qué pasa si no lo hago? ¿qué pasa si lo delego?

Identifiquemos lo que depende de nosotras y soltemos lo que no.

Tenemos que dejar que los demás se ocupen de la parte que les toca. Y si las cosas no están perfectas, asumir que no pasa nada.

Y si los trastes siguen ahí después de que llegaste de viaje… que ahí se queden.