¿Propina obligatoria? Restaurantes agregan el monto que clientes deben pagar
La controversia en saber si la propina es obligatoria o no siempre ha existido, pues existen restaurantes que añaden el monto sugerido en el ticket del cliente, una práctica que debería evitarse.

DURANGO, Durango.- Recientemente el caso de un famoso y prestigioso restaurante en Mazatlán, Sinaloa, generó una nueva polémica en torno a la propina que clientes deciden aportar a meseros; y es que un usuario de redes sociales hizo pública su queja porque le fue devuelto el dinero después de pagar su cuenta ya que le faltaban seis pesos para cumplir el porcentaje del establecimiento.
La insistente pregunta vuelve a la mente de los comensales: ¿La propina es obligatoria?
Son restaurantes el giro de negocios más común donde el concepto de propina está arraigado, sin embargo está gratificación no debe ser obligada sino voluntaria, recalca la Presidenta de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y de Alimentos Condimentados (CANIRAC) filial Durango, Adriana Porras Zubiría.
Es una gratificación voluntaria por un servicio recibido, principalmente en actividades que implican una atención directa al consumidor, como restaurantes o bares; que sea generosa o no, dependerá también de la calidad de la atención y servicio.
Adriana Porras, - Presidenta de la CANIRAC .
Respecto a que algunos establecimientos agregan la propina a la suma en el ticket, mencionó que no es lo correcto y debería evitarse, lo que sí es aceptable es que refieran porcentajes como sugerencia, pero siempre en la libertad de que el cliente decida.
“Obligatorio para el cliente no es, pero hay negocios que incrementan su salario con base a las propinas, no es correcto que se pretenda una obligación para el comensal, la propina se debe ganar y no exigir”, expresó.
Por su parte, la Profeco señala que ningún porcentaje de propina es obligatorio, darla o no, es una decisión libre y voluntaria del consumidor.
La Ley Federal de Protección al Consumidor establece en el artículo 10 que: “Los proveedores no podrán aplicar métodos o prácticas comerciales coercitivas y desleales, ni cláusulas o condiciones abusivas o impuestas en el abastecimiento de productos o servicios”.