Conoce la historia de 'Los güeros de los jugos' de Escobedo
El trabajo y buen ejemplo de don Juan Manuel llevó por el buen camino a si hijo para convertirse en los famosos güeros de los jugos.
ESCOBEDO, Nuevo León.- No cabe duda que el amor de un padre hace que sus hijos sean personas responsables, tal es el caso de don Juan Manuel Rodríguez, quién trabaja arduamente en la calle en compañía de su hijo Juan Carlos Rodríguez, ambos conocidos en Escobedo como 'Los güeros de los jugos'.
Originario del municipio de Cadereyta, don Juan Manuel, trabajaba en una empresa acerera, pero un reajuste de personal lo dejó sin trabajo, por lo que decidió pasar unos días en su rancho y traer algunas naranjas que utilizaría para su consumo.
Un día hizo algunos jugos y los regaló a unos vecinos y al probarlos sus vecinos le pedían que les vendiera algunos litros.
Al ratito llega la vecina, estábamos en la sobre mesa y llega la vecina y nos dice que si no teníamos jugos para vender están muy ricos, nos quedamos viendo todos y nos dio del si, pues de aquí somos, con el reajuste y con tres hijos, el estudio, los gastos de la casa, la luz, el agua, el gas, la alimentación y todo eso pues, haga de cuenta que de ahí nos dio del sí .
Trabajo que desempeña desde hace ya 23 años y en los cuales ha seguido sus pasos su hijo Juan Carlos Rodríguez Garza, a quien enseñó a ganarse la vida desde pequeño.
De principio me decía que estaba muy chico para trabajar que esto y que el otro, pero ya desde el momento en que empieza a ver dinerito para él mismo, porque yo le dije por cada jugo que venda, yo le voy a dar algo.
A través del trabajo diario, Juan Carlos, hijo de don Juan Manuel Rodríguez, comenzó a valorar diariamente el esfuerzo que realizaba su padre par poder llevar el pan a casa.
Había motivación entonces los primeros días, como en todos lados había vergüenza, pero hubo más grande la necesidad y dije, pues de aquí soy, empecé a ver billetitos y dije, vamos a echarle ganas papá y encomendados a Dios, haciendo lo que nos gusta y hasta la fecha compadre ahora que ya soy padre de familia comprendo por qué la insistencia de mi padre que me enseñara a trabajar desde muy pequeño.
En ocasiones los hijos hacen travesuras mismas que en algunas ocasiones fueron sorprendidas por los padres, quienes a base de llamadas de atención, generan una gran lección de vida.
Yo tenía la constante de llegar y recibirlo con un abrazo, pero en un descuido yo le agarraba la cartera para poder completar mis gastos que tenía yo de niño, entonces le agarraba que un billete de a veinte o de a cincuenta, al paso del tiempo se percata y me descubre en la travesura y me dice hijo las cosas se piden chance y hasta te puede ir mejor.
Desde muy temprano todos los días padre e hijo se encuentran en el crucero de Sendero y Morenita Mía, en Escobedo, lugar donde se hicieron muy conocidos y popularizados a través de las redes sociales, pero el secreto para que este par trabaje y tengan tanto éxito no es el buen sabor de sus jugos, pues sin duda es la alegría que transmiten a cada automovilista que circula por ese lugar quienes al verlos muestran que el buen ejemplo de un padre siempre hará llevar por el camino de bien a sus hijos.
