De Tequila para el mundo: así nació la experiencia cultural de Mundo Cuervo
Tequila, para Mundo Cuervo, es un pueblo que se ha convertido en uno de los mayores patrimonios de México, como lugar, como cultura, y como bebida que da pertenencia a los mexicanos.
Lo que comenzó hace más de 260 años como una labor agrícola en el corazón de Jalisco, se ha transformado hoy en uno de los pilares turísticos y culturales más importantes de México.
A través de la visión de figuras como Araceli Ramos y el liderazgo de la familia Beckmann, Mundo Cuervo ha logrado que el nombre de “Tequila” no solo sea una bebida, sino una experiencia de orgullo nacional y desarrollo sostenible que atrae a miles de visitantes al año.
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¿Cómo se convirtió una destilería en un motor de transformación social?
La historia de Mundo Cuervo está ligada intrínsecamente a la identidad de México. Con 267 años de existencia, Jose Cuervo se posiciona como la tequilera más antigua y grande del mundo. Lo que originalmente era un pueblo dedicado exclusivamente a la producción industrial, evolucionó gracias a una apuesta por el “sentido de pertenencia”.
Araceli Ramos, directora de promoción de la marca, destaca que la inspiración provino de querer presumir el esfuerzo de las manos mexicanas, transformando la infraestructura de la empresa en un producto turístico de primer nivel que hoy sustenta la economía local y ha convertido a Tequila en un Pueblo Mágico emblemático.
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¿Qué secretos guarda el proceso detrás de cada botella?
Visitar Mundo Cuervo es adentrarse en un ciclo que requiere paciencia y respeto por la tierra. El video resalta que el proceso comienza en los campos agaveros, donde un hijuelo de agave tarda entre 8 y 10 años en estar listo para la jima.
Los turistas pueden ser testigos del trabajo de los jimadores y recorrer las destilerías para entender las etapas de cocción, molienda, fermentación y añejamiento.
Esta “ruta del tequila” permite a los visitantes no solo degustar la bebida, sino también vivir experiencias sensoriales como catas, maridaje o el envasado personalizado de su propio tequila en las históricas cavas de la familia.
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¿Cuál es el legado cultural que Mundo Cuervo ofrece a sus visitantes?
Más allá de la producción de destilados, el proyecto ha expandido su horizonte hacia el arte y la tradición. Un ejemplo clave es el Centro Cultural Juan Beckmann Gallardo, un espacio que Araceli Ramos define como una “joya” para el pueblo.
En este recinto se resguardan colecciones que van desde la historia de la charrería (el deporte nacional) hasta piezas de arte popular y contemporáneo.
Con hoteles de lujo, recorridos en tren y una oferta gastronómica en constante crecimiento, Mundo Cuervo se consolida como un legado que permite a los mexicanos y extranjeros decir con orgullo: “Esto es lo que somos los mexicanos”.
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