El misterio de los duendes en BCS: historias desde el desierto sudcaliforniano
En BCS aún se cuentan historias de duendes que habitan minas, casas y teatros. Algunos juran haberlos visto, otros solo sienten su presencia.

Pequeños, traviesos y escurridizos, para muchos son solo figuras del folclore, pero en Baja California Sur, los duendes siguen siendo protagonistas de relatos, sustos y leyendas que se cuentan al caer la noche.
Ya sea en casas, minas antiguas o incluso en recintos culturales como el Teatro de la Ciudad, la presencia de estos seres sigue generando curiosidad.
Te puede interesar....
¿Qué son los duendes y los chaneques?
En la tradición popular mexicana, los duendes son criaturas fantásticas de pequeña estatura que suelen habitar en rincones oscuros, árboles, cuevas o casas antiguas. Se les atribuyen actos traviesos como mover objetos, esconder pertenencias o generar ruidos inexplicables. Aunque se les considera en general inofensivos, su aparición puede ser inquietante.
Por otro lado, están los chaneques, una figura mitológica de origen mexica que ha sido adoptada en el imaginario de distintas regiones del país, incluyendo Baja California Sur. Se cree que los chaneques son espíritus protectores del monte, que custodian los bosques, animales y cuerpos de agua.
Algunos relatos aseguran que tienen el poder de hacer perderse a quienes los ofenden o no les piden permiso al entrar en su territorio.
Te puede interesar....
¿Por qué se cree que los duendes habitaban minas en BCS?
Una de las leyendas más antiguas sobre duendes en Baja California Sur está ligada a las antiguas minas repartidas por todo el estado, especialmente en localidades como El Triunfo, Santa Rosalía y San Antonio.
Según testimonios de generaciones pasadas, los duendes vivían en los túneles subterráneos y protegían los minerales, a veces guiando o advirtiendo a los mineros, pero también haciendo travesuras o provocando accidentes cuando se sentían invadidos.
Culco BCS documentó algunos testimonios de pobladores de "El Campamento", una pequeña comunidad que se asentó arriba de un cerro, debajo de este se encuentran unas cuevas que parecen hechas por los primeros habitantes de la península.
Las historias cuentan que por las noches suceden cosas muy extrañas ahí, una mujer vestida de blanco ha sido vista saliendo de la cueva durante las noches, y los duendes no dejaban dormir a los habitantes de la zona.
Algunas historias incluso señalan que ciertos mineros dejaban ofrendas o hablaban en voz baja para no molestarlos durante su jornada laboral.
Te puede interesar....
¿Hay historias de duendes en casas sudcalifornianas?
Además del mito minero, en comunidades actuales de Baja California Sur persisten testimonios sobre encuentros con duendes en hogares particulares. Las versiones más comunes narran cómo se escuchan risas infantiles, pasos en el techo o la desaparición súbita de objetos pequeños como llaves o aretes.
En Reddit, un usuario compartió la historia de un presunto duende que, disfrazado de niño llorando, se escondía en las sombras para atraer a quienes pasaban. Cuando se acercaban, desaparecía sin dejar rastro, dejando a los testigos con más preguntas que respuestas.
En La Paz, algunos empleados y visitantes del Teatro de la Ciudad han reportado fenómenos similares: objetos que cambian de lugar, sonidos extraños y sombras que se escabullen entre bambalinas.
Aunque la leyenda más conocida es la de una niña fantasma, también se han atribuido sucesos a la presencia de duendes.
¿Mito, creencia o parte del folclore de BCS?
Ya sea por tradición oral, sugestión o algo más, los duendes siguen vivos en el imaginario sudcaliforniano.
A veces se les teme, otras se les respeta, lo cierto es que, en una tierra tan llena de contrastes como Baja California Sur estos pequeños seres siguen teniendo un lugar en las historias que se cuentan al anochecer.