El pequeño pueblo de BCS que alberga uno de los balnearios más famosos del estado
Un pueblo de BCS atrae a quienes buscan descanso; su arroyo y tranquilidad lo convierten en uno de los balnearios más auténticos.
Un pequeño pueblo de Baja California Sur alberga uno de los cañones ideales para refrescarse y también uno de los balnearios menos conocidos entre La Paz y Los Cabos.
Este lugar es perfecto para una escapada de fin de semana, sobre todo en verano, cuando el calor se siente más fuerte. Si quieres saber de qué sitio estamos hablando, aquí te lo contamos.
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Video | Balneario en San Bartolo
¿Cuál es el pueblo de Baja California Sur que tiene uno de los balnearios más famosos?
En la sierra, hay un rincón donde el aire es fresco, el agua corre clara y el paisaje se cubre de árboles frutales y palmas. El sonido del arroyo y la sombra natural reemplazan al bullicio de la ciudad y a los paisajes más turísticos.
No hay hoteles de lujo ni grandes construcciones, pero sí un ambiente que ha servido como punto de descanso para viajeros y familias por generaciones.
Este lugar es San Bartolo, un pequeño pueblo donde se encuentra la Huerta del Ojo de Agua, un balneario natural rodeado de vegetación.
Aquí, el agua brota directamente del cerro y alimenta pozas y albercas de piedra, donde es posible nadar en agua limpia y fresca.
Aunque tiene un costo de entrada, es una opción accesible para quienes buscan un espacio tranquilo, sin las multitudes de las playas más conocidas.
Foto: Turismo La Paz
¿Qué hace único a este balneario natural en Baja California Sur?
Este oasis, también llamado Huerta del Ojo de Agua Oasis San Bartolo, tiene un manantial natural que alimenta albercas de piedra en medio de un entorno lleno de palmas, guayabos y mezquites.
El agua fluye directamente del cerro, por lo que es clara, fresca y constante durante todo el año. A diferencia de otros lugares recreativos con estructuras formales, este sitio se mantiene más cercano a lo natural.
Hay sombra real, el sonido del agua reemplaza a la música artificial y es común ver aves, insectos y vegetación silvestre.
También cuenta con palapas, mesas, sillas, baños y una pequeña tienda, lo que permite pasar el día en familia con lo básico para descansar.
La entrada tiene un costo de $95 pesos por persona mayor de cuatro años, y el horario de atención va de lunes a viernes de 10 a.m. a 6 p.m., y fines de semana desde las 9 a.m.
San Bartolo también guarda un cañón escondido, ideal para hacer caminatas, acampar o simplemente alejarte un rato entre piedras, árboles y una pequeña cascada que aparece en ciertas temporadas.
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¿Dónde se ubica y cómo llegar?
El balneario natural está ubicado en el kilómetro 286 de la carretera Transpeninsular La Paz–San José del Cabo. Desde La Paz, el trayecto es de aproximadamente 1 hora con 15 minutos, y desde Los Cabos, el tiempo es similar.
Cuando llegues al pueblo de San Bartolo, solo tienes que tomar la calle Ramón Cota, justo pasando la iglesia, y seguir hasta encontrar la entrada principal de la huerta.
El camino está marcado de manera sencilla. Además de darte un buen chapuzón o descansar bajo la sombra, puedes aprovechar para comprar frutas frescas o dulces típicos que se venden en la zona.
Es común encontrar a personas del lugar vendiendo comida o dando servicios básicos, así que es buena idea llevar dinero en efectivo y todo lo que necesites para pasar el día con comodidad.
¿Qué dicen quienes ya lo visitaron?
Aunque no hay citas textuales registradas, muchas personas que han ido al balneario lo describen como un espacio tranquilo, ideal para hacer una pausa en el camino.
Resaltan que el agua está limpia, que el clima es fresco, especialmente bajo la sombra de los árboles, y que es un buen punto para convivir en familia.
También mencionan que es un sitio apreciado tanto por viajeros como por personas locales, ya que ofrece descanso sin complicaciones ni ruido.
Foto: Turismo La Paz
¿Por qué vale la pena hacer una parada en este pueblo de Baja California Sur?
En Baja California Sur no todo es playa ni grandes hoteles. También hay lugares como este balneario natural en San Bartolo, que se mantienen simples y conectados con la naturaleza, como un oasis en medio de la sierra.
Tiene agua que nace del cerro, árboles que dan sombra y es fácil de llegar si vienes por carretera entre La Paz y Los Cabos.
No hay construcciones grandes ni ruidos, solo el sonido del arroyo y el paisaje verde alrededor. Es un sitio tranquilo, con lo necesario para descansar sin complicaciones.
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No necesita ser famoso para que valga la pena. Su encanto está en lo que ofrece tal cual es el agua limpia, sombra natural y un buen respiro del calor.
Un lugar que sigue ahí, tranquilo y escondido entre las palmas. Y así como este, en Todos Santos también hay un oasis ideal para quienes buscan refrescarse lejos del ruido.
