La guerra de los 12 días
Conoce los detalles del conflicto entre Israel e Irán que desembocó en una guerra de 12 días en Medio Oriente.
Medio Oriente volvió a encender las alarmas del mundo.
En apenas doce días, entre el 13 y el 24 de junio, Israel e Irán protagonizaron un conflicto armado de altísima intensidad, que involucró directamente a Estados Unidos, lo que transformó una tensión bilateral en una crisis geopolítica de escala global.
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Todo comenzó el viernes 13 de junio, cuando Israel lanzó una ofensiva masiva contra instalaciones nucleares iraníes, alegando la necesidad de frenar su desarrollo armamentista.
La respuesta iraní no se hizo esperar. Misiles y drones fueron enviados contra objetivos israelíes, lo que marcó el inicio de una escalada sin precedentes
En medio de ese caos, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, decidió intervenir directamente, ordenando ataques aéreos y marítimos contra al menos tres instalaciones nucleares en Irán. La región quedó, por momentos, al borde de una guerra generalizada.
Durante días, los bombardeos se intensificaron, los mercados energéticos se sacudieron, y el mundo contuvo la respiración ante la posibilidad de un conflicto aún mayor.
Irán bloqueó el estrecho de Ormuz, un paso estratégico por donde transita más del 20 por ciento del gas y petróleo que abastece al planeta. La tensión escaló más allá de lo militar… Tocó fibras económicas, energéticas y diplomáticas.
Sin embargo, con el paso de los días, quedó claro que, a pesar de la magnitud del enfrentamiento, no estábamos en la antesala de una Tercera Guerra Mundial. Irán, aunque peligroso y con capacidad de respuesta, se encuentra hoy aislado.
Sus aliados en la región están debilitados o simplemente ya no existen como actores militares significativos: Hezbolá en Líbano está desgastado; los hutíes en Yemen, presionados; y el régimen de Bashar al-Assad en Siria, ha colapsado. Rusia, sumida aún en su conflicto con Ucrania, no tiene intención de abrir otro frente.
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Fue en este contexto que, el lunes 23 de junio, el Presidente Donald Trump sorprendió al anunciar que Israel e Irán estaban alcanzando un acuerdo para un alto al fuego, y que Irán sería el primero en cesar hostilidades
El anuncio parecía una luz al final del túnel. Sin embargo, horas más tarde, el Ministro de Relaciones Exteriores iraní desmintió la existencia de tal acuerdo y dejó claro que las operaciones militares continuarían si Israel no detenía sus ataques.
El desenlace llegó finalmente este martes 24 de junio, cuando el Presidente de Irán anunció el "fin de la guerra de 12 días", asegurando que su país pondría fin a las operaciones militares impuestas por Israel.
Una declaración que, aunque no implica un acuerdo formal de paz, marca el cierre —al menos temporal— de esta peligrosa escalada.
El saldo humano es devastador: Más de 600 muertos en Irán, al menos 28 en Israel, cifras oficiales, que siguen siendo preliminares… y una región entera sometida nuevamente al trauma de la guerra.
“La guerra de los 12 días” no es solo una expresión cronológica. Es también un símbolo de lo efímero que puede ser el paso de la tensión a la destrucción. Una muestra de lo frágil que es la paz en un mundo donde la diplomacia cede terreno ante la lógica del misil.
Hoy, más que nunca, es urgente replantear el equilibrio global, reforzar los mecanismos de prevención de conflictos y exigir a las potencias —especialmente a las que se autodenominan defensoras de la libertad y el orden mundial— responsabilidad, mesura y visión de largo plazo.
Esta vez se contuvo el incendio
Pero el terreno sigue seco… y las brasas aún arden bajo la superficie.
- Soy Gregorio Martínez… Más Allá de la Noticia… Nos vemos y nos escuchamos… Aquí en POSTA…
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