Detienen a mando de Guardia Nacional en Puebla por asesinato de alumna, pero no le avisan a su familia
La mamá de Fany reveló que su hija le dijo que sufría acoso en el cuartel de la Guardia Nacional
La noche de este domingo en el municipio de Ajalpan en Puebla, cercano a Oaxaca, se manifestaron familiares y amigos de la cadete de la Guardia Nacional, Estephany Carmona Rojas, de 19 años, quien fue enterrada el pasado viernes 17 de octubre.
La manifestación para exigir el esclarecimiento por su asesinato la encabezó la mamá de Estephany, Maria Fernanda Carmona, quien además de solicitar la detención del posible asesino, reveló que la Guardia Nacional no ha tenido mayor comunicación con ella.
Familia de Fany desconoce detención de mando de Guardia Nacional
Las declaraciones de la mamá de Fany, como la conocían en Ajalpan, contrastan con la detención de Yair Manuel "N", sargento del cuartel de Acapulco que estaba a cargo de Estephany y quien se dio a la fuga tras su muerte.

La noche del domingo 19 de octubre, en Ajalpan la mamá de Fany dijo que no tenía conocimiento de ninguna detención, pues no le habían avisado de manera oficial que el posible autor material había sido detenido.
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¿Cuándo detuvieron al posible asesino de Estephany Carmona?
El pasado sábado 18 de octubre, trascendió la detención de Yair Manuel "N", sargento segundo del cuartel de la Guardia Nacional en Acapulco, Guerrero.
Diversas fuentes refieren que fue detenido en la región de Llano Largo, en la misma zona del puerto de Acapulco, su detención se realizó a las 10 de la mañana del aquel día.

De acuerdo a los protocolos de la Guardia Nacional, el mando de la Guardia Nacional sería trasladado a la Ciudad de México para enfrentar un juicio militar. Sin embargo, a pesar de su detención la familia de la víctima no fue notificada, para poder presentar alguna denuncia.
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¿Cómo fue la marcha de #JusticiaParaFany?
La tarde noche de este domingo cientos de personas se congregaron cerca de la casa donde nació y vivió Fany y desde ahí caminaron hacía el zócalo del municipio de Ajalpan.
La exigencia fue una sola: justicia por su muertes, pues ella se encontraba en un cuartel de la Guardia Nacional cumpliendo su sueño de ser policía federal.

Fany había relatado que ella sufría de acoso intenso al interior de la corporación pero resistía, pues su sueño era ser una mujer policía. Su mamá, también confirmó que su hija le había comentado que padecía de acoso sistemático.
Murió por al menos dos disparos en la cabeza, tenía 19 de años, en diciembre cumplia 20 y vio frustrado su sueño.
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