Personas sin hogar en Monterrey agradecen la bondad de los regios

Juany y Juan Carlos son amigos desde hace un par de años. Se encontraron en los caminos del Centro de Monterrey, donde recogen PET, cosas que les puedan ser útiles para vender, y muchas veces la gente les regala un plato de comida o algunas monedas.

POSTA platicó con ellos mientras estaban en un receso de sus actividades.

Se sentaron por un momento en las bancas ubicadas en la calle 15 de Mayo, antes de llegar a la calle Juárez.

Mientras contaban sus andares, Juan Carlos cortaba una piña que le regalaron en el mercado.

¿Cómo es el día a día de Juan Carlos?

Él contó que es originario de Oaxaca y tiene 60 años de edad.

Aunque llegó hace seis años a Monterrey, ya sabe identificar a los regios, porque son quienes, sin pedirles nada, comparten desde una moneda hasta un plato de comida.

A lo largo de su día a día, Juan Carlos:

• Recoge PET y materiales reciclables en el Centro.
• Depende de la generosidad de las personas para comer.
• Duerme donde puede, pero siempre intenta estar en zonas donde se sienta seguro.
• Reconoce a los regios como personas de buen corazón.
• Agradece los pequeños gestos como una sonrisa o una palabra amable.

Además, expresó que pocas veces se encuentran personas con esa bondad, por lo que considera importante reconocerlo y ser agradecido.

¿Qué dijo Juany, dónde vive y duerme?

Para Juany, quien tiene 48 años de edad, aunque la vida en la calle le ha dado algunas satisfacciones, también ha vivido malas experiencias, sobre todo por ser mujer y tener necesidades distintas a las de los hombres.

“No sé cuándo tengo que dormir o dónde me agarre la noche, no puedo conciliar el sueño, estoy a la expectativa de lo que pueda pasar, cuidándome, porque aquí en la calle todos somos iguales”, mencionó Juany.

Ella recoge PET y, para poder costear una comida, necesita reunir al menos cuatro bolsas de tamaño familiar.

Recorre las calles a diario, y además de juntar botellas, contribuye a reducir la contaminación.

Ambos aceptaron platicar con POSTA, pero pidieron no utilizar el micrófono, porque se sentían cohibidos.

¿Qué pidieron durante la grabación del contenido?

Ninguno de los dos pidió algo material, solo hicieron un llamado para que, cuando vean a personas sin hogar en las calles, les regalen un bote de agua, les deseen un buen día o simplemente les ofrezcan una sonrisa.

Con esa acción, aseguraron, es más que suficiente para hacer su día más ligero y agradable.