El Gigante de Solferino: la ceiba milenaria escondida en un santuario de orquídeas de Quintana Roo
Descubre el Gigante de Solferino, una ceiba milenaria en Quintana Roo rodeada de orquídeas y leyendas mayas

En el corazón del norte de Quintana Roo, cerca del camino que lleva a Holbox, se encuentra un tesoro natural que cautiva a visitantes por su misticismo, historia y belleza: el Gigante de Solferino. Este árbol milenario, una ceiba de aproximadamente mil años y 38 metros de altura, es considerado sagrado por la cultura maya y hoy se ha convertido en un atractivo turístico y espiritual.
A su alrededor florece un orquidiario con más de 40 especies que complementan este oasis verde, custodiado celosamente por los habitantes de la comunidad de Solferino.

Te puede interesar....
¿Dónde se encuentra el Gigante de Solferino y por qué es especial?
Ubicado en Solferino, una comunidad del municipio de Lázaro Cárdenas, Quintana Roo, el árbol milenario se halla a solo 15 minutos del puerto de Chiquilá, punto de acceso a Holbox.
Este ejemplar de ceiba, conocido como “El Árbol de los Deseos”, destaca no solo por su imponente altura y tronco de 10 metros de diámetro, sino por la energía que emana, según los locales. Visitantes lo abrazan para conectarse con la naturaleza o pedir deseos, convirtiéndolo en un símbolo espiritual y turístico.
Te puede interesar....
¿Qué leyendas y tradiciones rodean al árbol milenario?
La ceiba es considerada el árbol sagrado de los mayas, también llamado yaxché, y es protagonista de múltiples leyendas. Una de ellas es la de la X'tabay, una bruja maya que, según creencias populares, habita en árboles antiguos.
Aunque en Solferino no hay reportes de apariciones, el mito suma un halo de misterio al gigante. Además, el árbol fue defendido con firmeza hace 25 años por Juan García, quien amenazó con quitarse la vida si lo talaban. Hoy, él mismo funge como guía y protector del sitio.
Te puede interesar....
¿Qué se puede ver en el orquidiario de Solferino?
Al pie del Gigante de Solferino florece un orquidiario con más de 40 especies de orquídeas y bromelias, muchas de ellas endémicas de la región. Los visitantes pueden aprender sobre sus nombres científicos, propiedades y formas únicas.
Aunque el lugar no cobra entrada ni recibe apoyo gubernamental, acepta donativos voluntarios de quienes lo visitan, contribuyendo así a su conservación. El entorno natural es perfecto para quienes buscan ecoturismo, fotografía de naturaleza y experiencias espirituales.
Este rincón del Caribe mexicano no solo es un pulmón verde, sino también un lugar donde la tradición, la biodiversidad y el turismo sustentable conviven en armonía. ¿Ya lo conoces?