Oaxaca: Esta comunidad viven en medio del bosque, parece un paisaje sacado de un cuento
En lo más profundo de la Sierra Norte de Oaxaca, envuelto en un paisaje de cuento, se encuentra San Isidro Llano Grande, una comunidad única que ha hecho de la convivencia con el bosque su forma de vida.
En este poblado, los habitantes no solo viven en medio del bosque, sino que lo protegen con una gran vocación ecológica, lo que le ha valido ser reconocida como una de las comunidades más limpias de México.
¿Qué ofrece San Isidro Llano Grande?
Visitar San Isidro Llano Grande es mucho más que una simple escapada: es una oportunidad para reconectar con lo esencial de la vida y la naturaleza.
Sus senderos llevan al visitante por paisajes envueltos en niebla, rodeados de árboles centenarios, riachuelos cristalinos y una rica biodiversidad que se conserva intacta gracias a los cuidados de sus habitantes.
Una de las experiencias más memorables es el ascenso al Mirador “Las Torres”, a 3mil 300 metros sobre el nivel del mar.
Otro de los sitios imperdibles es El Pinovete, una caída de agua de 30 metros rodeada de flora silvestre y aves multicolores que acompañarán el recorrido con su canto.
¿Qué actividades se pueden realizar en San Isidro Llano Grande?
- Caminar a las 4:30 de la mañana, entre pinos y el canto de aves.
- Disfrutar el amanecer desde las alturas.
- Degustar la gastronomía local, como un desayuno cocinado con leña, tortillas recién hechas, chapulines y salsas típicas con el sabor del hogar oaxaqueño.
- Recorrer una brecha de terracería en medio de un exuberante bosque de pinos y encinos.
- Senderismo
- Ciclismo de montaña
- Observación de flora y fauna
En esta comunidad hay cabañas o áreas de campamento donde se puede hospedar, también hay un comedor comunitario, guías locales y renta de bicicletas, ideales para explorar en familia o con amigos.
¿Cómo llegar a San Isidro Llano Grande en Oaxaca?
- Para llegar a San Isidro Llano Grande es sencillo desde la ciudad de Oaxaca.
- Tomar la carretera federal 190 hasta Tlacolula.
- Al llegar a la desviación hacia Díaz Ordaz.
- Continuar rumbo a Cuajimoloyas.
- A solo diez kilómetros de ahí, aguarda este tesoro natural que invita a vivir el bosque, no solo a visitarlo.