Construyen el escenario para la crucifixión del Cristo de Iztapalapa

CIUDAD DE MÉXICO. - Fermín pelea contra el viento jalando un papalote en compañía de sus dos hijos en el Cerro de la ESTRELLA y cada golpe que se escucha, parece que lo hace perder la concentración, pero él sabe que es parte del trabajo que como vecinos realizan para la instalación del escenario de la pasión de Cristo.

Como vecinos, nos sentimos muy orgullosos de esta tradición, aunque no nos acercamos por la multitud.

Como muchos saben el origen de esta significación centrado en el milagro que habría salvado de una pandemia a esta región, y cuyo recuerdo es suficiente para mantenerla viva hoy más que nunca.

Es por eso que los trabajadores, se pasan postes de metal y pequeños martillos para ir dando forma a las torres que recibirán el equipo de sonido, la iluminación y los tres escenarios principales de la crucifixión del Cristo de Iztapalapa.

POSTA CDMX recorrió este barrio entre el polvo y el viento que parecía por momentos complicar el trabajo de quienes construyen las estructuras, quienes dijeron que todo debe quedar listo, probado y asegurado antes del próximo miércoles.

Es una fiesta, es una fiesta y es un orgullo que aquí se haga la representación.

Israel Vázquez habla poco, los últimos 50 años de su vida, los ha pasado en este mismo barrio y siente que está algo acostumbrado a los contratiempos que significan la Semana Santa de todos los años y que convierte un caos las que hasta hoy son a apacibles calles.

Está orgulloso que su barrio sea reconocido en muchas partes del mundo, por la representación de este teatro del pueblo a la que llega con unas 20 personas de compañía, y a veces se organizan para comer en este sitio o simplemente se dejan caer en las manos de los vendedores ambulantes.

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Cada año es una sorpresa, porque no sabe en qué va a acabar. Hay veces que hay pleitos, otras que llueve y otras que hace demasiado aire y polvo. Pero Todas son una invitación para estar presente como habitante de Iztapalapa. En este lugar.

Para Alondra Vázquez, esta recreación del Monte Calvario es su paso obligado todos los días para ir a su casa o bajar al pueblo como le llama, reconoce que es una atracción muy grande, el poder presenciar la construcción de este escenario, pero también confiesa que es tal la aglomeración, que le da miedo salir de su casa en esos días.

A mí no me gusta la representación, porque es como volver a revivir lo que pasó con Cristo y no me gusta.

Este es uno de los diversos lugares que cobrarán vida esta Semana Santa para cumplir con una tradición que cada vez más personas acuden a conocerla de diversas partes del país.