¿Ayuda la natación a ganar masa muscular?
La natación, aunque excelente para la resistencia y el cardio, no ofrece la tensión mecánica necesaria para ganar masa muscular como el entrenamiento de fuerza.
SAN PEDRO GARZA GARCÍA, Nuevo León.- La natación es ampliamente conocida por sus beneficios para la salud cardiovascular y su capacidad para mejorar la resistencia, además de ser una actividad recreativa. Sin embargo, cuando se trata de ganar masa muscular, la natación no es la opción más eficaz, ya que carece de ciertos elementos clave presentes en entrenamientos de fuerza como el levantamiento de pesas.
La resistencia del agua y el desarrollo muscular
A pesar de que el agua ofrece una resistencia constante durante la natación, esta no genera la tensión mecánica necesaria para promover un crecimiento muscular significativo. Los ejercicios de fuerza, como el levantamiento de pesas, crean una mayor tensión y fatiga muscular, lo que desencadena el proceso de hipertrofia o aumento de masa muscular. En cambio, la natación activa varios grupos musculares, pero su nivel de intensidad no es lo suficientemente alto para generar el estrés que los músculos necesitan para crecer.
Complementos necesarios para los nadadores
Aunque los nadadores profesionales tienen cuerpos tonificados, esto se debe a que complementan su entrenamiento acuático con ejercicios de fuerza fuera del agua, conocidos como dry-land training. Este tipo de entrenamiento está diseñado para mejorar la fuerza, la velocidad y la funcionalidad muscular, aspectos que son vitales para el rendimiento en el agua. El uso de cargas pesadas y ejercicios de alta demanda muscular en tierra les permite desarrollar masa muscular más allá de lo que ofrece la natación.
La natación no es suficiente para ganar masa muscular
Si bien la natación es un ejercicio completo y excelente para la salud general, no puede sustituir a un régimen de entrenamiento de fuerza si el objetivo es ganar masa muscular. Los nadadores de élite logran un físico musculado debido a una combinación de entrenamientos acuáticos y ejercicios de fuerza, lo que evidencia que la natación por sí sola no es suficiente para alcanzar el desarrollo muscular deseado.