Acuacultura y cambio climático, Yucatán busca alternativas para sostener la pesca
La acuacultura regenerativa puede sostener la actividad pesquera en Yucatán, ya que el calentamiento del mar está debilitando a especies clave.
El cambio climático y su impacto en el mar, así como la sobre explotación de las especies, está provocando un debilitamiento de poblaciones y alteraciones en los ciclos reproductivos de múltiples especies en la Península de Yucatán.
Este escenario ha encendido las alertas de investigadores y productores ante la necesidad de nuevas estrategias que permitan sostener la actividad pesquera del estado.
Foto: Alejandra Vargas
Así lo señaló Víctor Manuel Vidal Martínez, director general del Instituto Mexicano de Investigación en Pesca y Acuacultura Sustentable (IMIPAS).
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¿Cómo puede la acuacultura regenerativa responder al impacto del cambio climático en Yucatán?
Vidal Martínez, explicó que en Yucatán existe ya una base científica robusta con laboratorios capaces de producir organismos nativos como mero y lisa, los cuales pueden ser liberados para renovar poblaciones y sostener la actividad pesquera.
A esto se suma el potencial del cultivo de ostión, cuya concha captura carbono, lo que abre la puerta a esquemas de créditos de carbono azul. Este modelo no solo reduce impactos ambientales, sino que permite involucrar a pescadores y comunidades en proyectos que restauran ecosistemas costeros y generan ingresos bajo esquemas productivos sostenibles.
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Foto: Canva
¿Qué especies requieren atención urgente y qué avances tiene Yucatán en su cultivo?
El titular del IMIPAS, advirtió que el aumento de temperatura y la acidificación del océano están afectando a organismos como el pulpo, pepinos de mar, erizos, langostas y caracoles, cuyos caparazones se debilitan y se vuelven más vulnerables a depredadores.
Esto obliga a impulsar métodos de acuacultura regenerativa para garantizar la recuperación de las poblaciones y evitar que la presión pesquera los lleve al agotamiento.
Yucatán ya suma avances relevantes, el cultivo de pepino de mar está dominado; el pulpo muestra buenos resultados pese al porcentaje natural de canibalismo; y el mero se encuentra en etapa experimental con líneas de trabajo para reducir la mortalidad larvaria.
Víctor Manuel Vidal Martínez - Director general del Instituto Mexicano de Investigación en Pesca y Acuacultura Sustentable
En este tenor, dijo que el IMIPAS presentará un proyecto ante el Global Environment Fund (GEF) para fortalecer esta última especie, considerada una de las más afectadas por el cambio climático y la sobrepesca.
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Foto: Archivo POSTA
¿Qué necesita Yucatán para consolidar su crecimiento en acuacultura y maricultura?
Para el director del IMIPAS, el siguiente gran paso es fortalecer la relación entre inversionistas, productores e instituciones académicas, con planes de negocio sólidos que muestren la rentabilidad real de los cultivos.
El objetivo, dijo, debe alinearse al concepto de “océanos azules mediante acuacultura regenerativa” lo que implica restaurar ecosistemas, como los manglares, producir organismos para repoblación y ofrecer alternativas económicas que reduzcan la dependencia exclusiva de la pesca extractiva.
Con estos elementos, Yucatán podría consolidarse como un referente nacional en producción marina sustentable, finalizó.
