VIDEO | Mateo, el niño fanático del Metro, cumple su sueño y pasa un día completo como director
El pequeño fan del Metro vivió una jornada inolvidable con el respaldo del Sistema de Transporte Colectivo y el acompañamiento de su familia.
El pequeño fan del Metro vivió una jornada inolvidable con el respaldo del Sistema de Transporte Colectivo y el acompañamiento de su familia.
Hace algunos meses, la historia de Mateo, un niño fanático del Metro de la Ciudad de México, conmovió a miles de personas en redes sociales.

Su entusiasmo, conocimiento y cariño por el sistema de transporte más importante de la capital se volvieron virales tras un video publicado por Posta CDMX, que llegó hasta las oficinas del propio Sistema de Transporte Colectivo (STC).

Gracias a esa difusión, el equipo del Metro se puso en contacto con la familia de Mateo a través de Posta para preparar una sorpresa muy especial: convertirlo en el Director del Metro por un día.
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De un reportaje a un sueño cumplido
A las 11 de la mañana del sábado 18 de octubre, personal del Metro llegó a la casa de Mateo para recogerlo y comenzar una jornada que cambiaría su vida.

El pequeño no sabía nada; todo fue una sorpresa cuidadosamente planeada.
Me siento muy emocionado y feliz por lo que está pasando. Mi sueño es ser conductor del Metro y conocer una cabina
Mateo - Niño fan del Metro
Dijo Mateo con una sonrisa, mientras se trasladaba en una camioneta del Metro para su día como director.
El Metro organizó una experiencia completa para él, con un recorrido que abarcó desde las oficinas centrales hasta el centro de control, talleres y una cabina real de conducción, en donde pudo ver como la experta manejaba.

Mateo estuvo acompañado por su mamá, Karla Rodríguez, su hermana Silvana y su papá Gustavo Flores que compartieron con orgullo este momento.
oficial: Mateo es Director del Metro por un día
Al llegar a las oficinas centrales del STC, Mateo fue recibido por el Director General, Adrián Rubalcava, quien le dio la bienvenida personalmente y lo nombró “Director del Metro por un día”.
El pequeño conoció la oficina principal, la sala de juntas y el funcionamiento interno de las áreas administrativas.

Karla Rodríguez, madre de Mateo, destacó la importancia de acompañar los intereses de las infancias:
A todas las mamás les digo que nos demos ese tiempo de conocer los sueños de nuestros niños y niñas, apoyarlos, porque es muy bonito verlos felices cumpliendo sus sueños
Karla Rodríguez - Madre de Mateo
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El corazón del Metro, desde los ojos de un niño
A las 13:00 horas, Mateo visitó el Puesto Central de Control, el espacio donde se coordina toda la operación de las líneas del Metro. Allí, pudo observar los paneles, monitores y sistemas que permiten que millones de personas viajen cada día.
En este lugar Mateo realizó muchas preguntas y observaciones pero también entendió a la perfección el funcionamiento.

Más tarde, a las 14:00 horas, recorrió el área de seguridad y monitoreo, donde le explicaron cómo funciona la red de cámaras y el trabajo de la Policía Bancaria e Industrial dentro del sistema.
El director Adrián Rubalcava destacó el valor de que niñas y niños se interesen por el funcionamiento del Metro:
“Es importante que los niños que aman el Metro se involucren más. Una de las cosas que buscamos es motivar a nuevas generaciones para que conozcan la tecnología, la operación y el mantenimiento. Que Mateo esté aquí nos alegra mucho, porque su pasión y conocimiento inspiran a otros a soñar con trabajar en el mejor sistema de América Latina
Adrián Rubalcaba - Director del Metro
Un final sobre rieles
En la recta final de su recorrido, Mateo conoció los transformadores eléctricos del Metro y aprendió que la central eléctrica del sistema genera suficiente energía para abastecer una ciudad del tamaño de Oaxaca.
Finalmente, a las 15:00 horas, vivió el momento más esperado: viajar en cabina junto a la conductora del Metro, Alejandra Gómez Macías, una de las mujeres más experimentadas en su ámbito, cumpliendo así el sueño que lo había acompañado desde pequeño: conocer la cabina del metro a primera vista.

La historia de Mateo no solo es la de un niño que cumplió su sueño, sino también la de cómo el interés por el transporte público puede despertar vocaciones, curiosidad y compromiso con una ciudad más justa y sostenible.
Mateo nos recordó que los sueños sí se cumplen y que el amor por el Metro también mueve a la Ciudad de México.

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